Tramposo, Michael , tramposo.Al igual que Rumer has sacado un gimmick, un espejismo, una ilusión. Pero tienes 23 años y no eres Amy, no te has tragado un viejo, tienes cara de producto, demasiado perfecta te queda la gorrita de tweed. Nos susurras palabras de amor al oído como otros lo hicieron pero no puedes ser como ellos pardiez. Bill Withers sólo hay uno, a Otis Reeding nadie ha sabido sucederle salvo a cachos Al Green, te utilizan para un buen motivo: que te forres y de paso, la gente compre sello Atlantic, descubra el pasado. Eso está muy bien pero no eres comparable a los maestros, eres otra cosa, que va a sonar más en los Starbucks que en las calles.
Sin embargo, caigo en el encantamiento. Con
Rumer me pasó lo mismo , primero pensé...
una Karen Carpenter más, no por Dios pero luego su Seasons of My Soul me empapó con sus buenas canciones y sus profundos homenajes.
Quiero que tu Home Again me golpeé cuando lo tenga que hacer, ahora no podría saber qué decir...bueno sí que me arrebata pero tiene truco, hay dejar que el tiempo te ponga donde debes estar: eso es algo tan apasionante.
Es muy fácil decir que con 23 años algo de rabia tenias que haber demostrado porque esto todo es dulce y suave como una tarde de julio pero no voy a lanzarte piedras, vienes en son de paz y con canciones debajo el brazo que suenan impecables en su primera escucha, casi es bossa soul.
Terry Callier y Richie Havens tienen que estar sonriendo de verte en todas las contraportadas de las revistas de rock, abarcando toda su dimensión a su costa, Donny Hathaway riéndose a carcajadas de que si volviera a nacer no se hubiera tirado de la ventana de un Hotel, ya que algún día iba a estar en boca de todos los enrrollados y iba a vender sus discos como rosquillas. El mundo está loco, ahora arrasa lo que antes no se comía un colín
Los unsung heroes del soul de guitarra de palo tienen un hijo moderno, su nombre Michael Kiwanuka ugandés de London-UK, además de Muswell Hill, pero mientras no olvidemos que aquellos fueron los mártires...
La edición tiene un extra con canciones producidas por Ethan Jones, me encanta la idea. Me gusta demasiado pero me pasa algo extraño.Me pasa como con Rumer. Yo he pasado por caja porque ya uno tiene una edad en la que le dice a su hijo que baje el volumen de la tele y esto es suave, muy suave, no molesta, más bien acaricia, tendrá que pasar la prueba de escucharlo por la Peña Angulo para deciros si es cariño o es amor. De momento hasta para sacarle las pegas, es esencial en este 2012.
Promete, tiene unos arreglos de cuerda preciosos y puede crecer y crecer a pesar de recordar a los mártires a los que fusila sin piedad, como los de los los bolsos de la acera del Corte Inglés.
