FORESTMAN´S BLUES
Stephen Thomas - Pitchfork 2018
Music From Big Pink may be rooted in the earth but it exists entirely within the head. The way it makes roots music sound as impressionistic and idiosyncratic as any other kind of rock’n’roll is revolutionary.
Si To Kingdom Come tenía la frescura y bravado bleatleliano del White Album y mucho de la banda de rock&roll de carretera y manta que habían sido hasta el momento The Hawks, la milagrosa In A Station, colocada en tercera posición, tiene ese anti-modernismo iniciado en el Reino Unido por los chicos de Muswell Hill casi a la vez, con otra de las obras maestras de 1968, The Village Green Preservation Society by The Kinks, El tiempo les ha puesto en su sitio a ambos discos y ahora les consideramos hermanos porque les vemos algún que otro rasgo común. Sobre todo su vuelta a un lugar donde huele a leña y se tienen tías que preparan el té con diferentes tipos de bizcochos.
A ambas bandas les respaldaban dos genios: Bob Dylan y Ray Davies. Es decir, los mejores compositores de canciones (letra y música) de la existencia.
La canción se podría considerar una nana con todos los elementos característicos del productor, el sexto The Band, John Simon. A él le gustaban los ecos oníricos en las voces y meter sorpresas melódicas por todos los rincones (su disco en solitario es una joya enterrada en el olvido que recomiendo encarecidamente porque es realmente complementario a MFBP)
A pesar de que el tono ya no es tan suplicante como en Tears Of Rage, cuya melodía también es del propio Richard, ya se ve el alma torturada que "el vocalista principal"- como les gustaba llamarle al resto- se gastaba en todas sus interpretaciones. Iba siempre al borde de la catarsis, como barfly y adicto al Grand Marnier que era. Nada mejor para describir su transmisora voz llena de sensibilidad que ese licor dulzón que produce la más agria de las resacas.
Pienso de nuevo que los discos de los Impressions junto con los de los Staples, fueron desgastados en los estéreos de la Big Pink ya que el candor del falsete de Curtis yo lo veo por todos los lados, como la técnica vocal de la familia gospel cuando se ponen a cantar los tres como ángeles.
Pero toda esa producción y filtrado eléctrico de las ideas democráticas de los cinco tamizadas por el sexto, le da todo el aire de soul moderno o psicodélico a In A Station y es muy alucinante escucharla en la nueva mezcla sin polvo. Y esta es la canción donde mejor se percibe la novedad. El sonido del clavinet la hace tan especial...
In A Station es un encantamiento que va formando una especie de género junto al resto: los blues del guardabosques. Unos escoceses afincados en Connemara-Irlanda iban a grabar los del pescador veinte años más tarde, en una movida espiritual, la de los Waterboys, inspirada en la de las Basement Tapes y The Band con Bob Dylan. Avanzar replegándose a la retaguardia de la música popular.
Ya son tres canciones de la cara A y llama la atención el protagonismo de Richard Manuel, el cual marca mucho este debut porque todos tenían claro que era él era el soulman entre soulmen, la voz adecuada a ese tipo de sonido único que sacaron de esa casíta rosada que ahora se alquila - por una pasta- en Airbnb.
Once I walked through the halls of a station
Someone called your name
In the streets I heard children laughing
They all sound the same
Wonder, could you ever know me
Know the reason why I live
Is there nothing you can show me
Life seems so little to give...
Richard Manuel: Lead Vocal & Piano
Rick Danko: Back Vocal & Bass
Robbie Robertson: Electric Guitar & Acoustic Guitar
Garth Hudson: Clavinette & Electric Piano
Levon Helm: Drums
A ambas bandas les respaldaban dos genios: Bob Dylan y Ray Davies. Es decir, los mejores compositores de canciones (letra y música) de la existencia.
La canción se podría considerar una nana con todos los elementos característicos del productor, el sexto The Band, John Simon. A él le gustaban los ecos oníricos en las voces y meter sorpresas melódicas por todos los rincones (su disco en solitario es una joya enterrada en el olvido que recomiendo encarecidamente porque es realmente complementario a MFBP)
A pesar de que el tono ya no es tan suplicante como en Tears Of Rage, cuya melodía también es del propio Richard, ya se ve el alma torturada que "el vocalista principal"- como les gustaba llamarle al resto- se gastaba en todas sus interpretaciones. Iba siempre al borde de la catarsis, como barfly y adicto al Grand Marnier que era. Nada mejor para describir su transmisora voz llena de sensibilidad que ese licor dulzón que produce la más agria de las resacas.
Pienso de nuevo que los discos de los Impressions junto con los de los Staples, fueron desgastados en los estéreos de la Big Pink ya que el candor del falsete de Curtis yo lo veo por todos los lados, como la técnica vocal de la familia gospel cuando se ponen a cantar los tres como ángeles.
Pero toda esa producción y filtrado eléctrico de las ideas democráticas de los cinco tamizadas por el sexto, le da todo el aire de soul moderno o psicodélico a In A Station y es muy alucinante escucharla en la nueva mezcla sin polvo. Y esta es la canción donde mejor se percibe la novedad. El sonido del clavinet la hace tan especial...
In A Station es un encantamiento que va formando una especie de género junto al resto: los blues del guardabosques. Unos escoceses afincados en Connemara-Irlanda iban a grabar los del pescador veinte años más tarde, en una movida espiritual, la de los Waterboys, inspirada en la de las Basement Tapes y The Band con Bob Dylan. Avanzar replegándose a la retaguardia de la música popular.
Ya son tres canciones de la cara A y llama la atención el protagonismo de Richard Manuel, el cual marca mucho este debut porque todos tenían claro que era él era el soulman entre soulmen, la voz adecuada a ese tipo de sonido único que sacaron de esa casíta rosada que ahora se alquila - por una pasta- en Airbnb.
Once I walked through the halls of a station
Someone called your name
In the streets I heard children laughing
They all sound the same
Wonder, could you ever know me
Know the reason why I live
Is there nothing you can show me
Life seems so little to give...
Richard Manuel: Lead Vocal & Piano
Rick Danko: Back Vocal & Bass
Robbie Robertson: Electric Guitar & Acoustic Guitar
Garth Hudson: Clavinette & Electric Piano
Levon Helm: Drums
Me parece una forma espectacular de celebrar el 50 aniversario de esta obra maestra y los diez de la land. Todas son favoritas.
ResponderEliminarAbrazos.
Disertación de poeta/poetisa..., todavía parece que te queda el recuerdo de Aretha entre los dedos. Excelente.
ResponderEliminarAbrazos,
JdG