DIRECTOS DE 2012

BON IVER EN EL PALACIO EUSKALDUNA:
BEST CONCERT LAND 2012

Veinticinco conciertos es poco pero los miro de reojo a la derecha y veo que estoy orgulloso de todas esas entradas y la selección ha sido meticulosa pero creo que ha valido la pena.

En general, no me gustan los macro conciertos aunque sean de mi onda como lo es el Azkena, se pierde mucho en el aire y la multitud aunque  seas Bruce o los Stones ( los únicos capaces de sonar a club , por momentos, en la distancia)
Nunca he comprado un bono, salvo aquel que nos salió a millón para ver a Bob Dylan en el festival de la vaca en Pirineos hace ya unos cuantos años. 

Este 2012 ha sido espectacular en este capitulo por varias razones: porque Bilbao se ha consolidado como plaza de podium en las giras de artistas internacionales de postín, sobre todo los rodrifriendly con algo a destacar: la consolidación de la gloriosa y preciosa programación, sonido, estética y de todo de nuestra Sala BBK en plena Gran Vía, pues no somos chulos ni nada...

Espacio donde se masca cada respiración y cada nota, cada sentimiento y cada latido, de las suelas de Kurt Wagner a los lamentos de amor soulful de John Hiatt o el chisporroteo de la Martin de Jorma Kaukonen. 

Sinceramente para el año que viene me pienso proponer ir a todos los que programen porque allí suena todo a gloria.

También ha sido el año de Bob en Bilbao y Bayona (doblete) con esa vuelta de fans por nuestra ciudad, con mi darling companion,  la tarde previa a su bolo en Bilbao pensando en encontrarnos con él  y say hello. Casi lo conseguimos, se escondió en La Bilbaina y no somos socios.

Es muy dificil destacar y numerar los conciertos pero lo que tengo claro es que estuve en uno ANTOLÓGICO y ese fue el de BON IVER, no es normal abrazarse de gozo con tus amigos y musiqueros de siempre tras un concierto como si nos hubiera tocado la loteria. Pues así fue.

Su propuesta escénica y musical fue el 10 de Nadia , la famosa atleta. Y la esperanza de que tipos como Justin o sus amigos The National nos tengan en vilo para mirar hacia adelante y tener esperanza en cosas de esas que salen en las enciclopedias a largo plazo.

De solistas me quedo con el concierto de John Hiatt, al que aunque había visto en su anterior gira por estos lares, en concreto en Donosti y ya me voló la cabeza, aquí en la sala BBK a tan pocos metros me resultó lo más parecido a ver a un Dios americano cantar: recordé a su amigo Ry y pensé, John es soul, soul is the answer. 

Como también fue una experiencia religiosa ver a trancas y barrancas ( llamada de trabajo asquerosa al principio, tensión y casualidad)  al señor Lee Fields y sus Expressions como si estuvieran tocando en mi casa. A c o j o n a n t e , pese al percance.

Bruce , otro soulman , en Donosti me flipó y su Seven Days To Rock me recordó a aquel chaval que todavía no tenía trabajada la musculatura allá por 1980 y su Backstreets a que todavía me reconozco como un romántico incurable en mi canción favorita del genio de NJ.

Bob Dylan , su hermano mayor, en Bilbao me gustó mucho pero en Bayona me emocionó, haciéndo verdadera la regla de que a Dylan le puedes seguir en una gira completa que no te va a hacer una noche igual NUNCA.

En la preciosa ciudad y su plazita encantadora de toros le dió por los mimosin blues porque estaba Charo , ahí llorando y empalmó un set con Love Minus/Desolation Row/Make You Feel My Love y Forgetful Heart...¿Quiés es capaz de no llorar ante semejante boleto? El chanssonieur salió de paseo y fue una comunión mágica con un público , el francés, muy culto que sabe de respeto y no de acontecimiento social y potes posteriores como en Bilbao.

Otra flipada de concierto fue el de Jimmy Cliff: uno esperaba el arrastre y el circo y mira por donde Jimmy llegó con más soul o tanto soul como nos dió a la Humanidad en su POM debut.

Escuchar su Many Rivers To Cross y su magnífico, lo recomiendo a tope, nuevo disco fue un Resurrección Total ( Rebirth) G  E N I O .

A nivel emotional rescue, los Dream Syndicate dieron la campanada, los Crazy Horse de mi generación, adorables, explosivos y con uno tras otro clásico.El Wop Festival ha sido una de las cosas más sorprendentes y valientes de este 2012 y consiguieron un sueño con su cartel y propósito.

Pero otra cosa que no quiero dejar en el tintero es lo que este próximo viernes se repite en una fecha más adecuada ya que , el anterior, al programarse en miércoles santo no congregó a toda la gente que espero congregue en la noche previa a la de los Reyes: el homenaje de Rubia a Carole King y de los Fakeband, mis niños, a The Last Waltz: fue ver para creer y yo creí morir de placer.
Entre que pinché mis vinilos desde Street Legal a los Impressions hasta escuchar como se atrevieron con éxito con el Caravan de Van, ver para creer. El próximo viernes encima los de Getxo vendrán reforzados con un saxofonista para hacer los arreglos Toussaint: mejor me llevo un desfibrilador.

Un año muy bueno de directos , sobre todo hasta el verano. Al 2013 le pido que vengan los Dexys y que Neil se acerque a Vitoria al Azkena y de paso se pase por el Rust Fest de Frías , que está a tiro de piedra hombre. Soñar es gratis. Gracias a todos los que me acopañaron en dichos conciertos, en especial a John Phillips que se acercó a Bayona y sonaron los mimosín blues.

A veces se captan momentos mágicos y soulful como éste. Me hubiera gustado captar el Have a little Faith de Hiatt en la BBK pero estaba prohibido, igual de soulful y con el mérito de ser un rostro pálido.