lunes, 23 de julio de 2012

BON IVER EN EL PALACIO EUSKALDUNA-22 DE JULIO 2012



UNA TEMPESTAD DE BELLEZA INFINITA

Ayer, el concierto de Bob Iver en el Palacio Euskalduna  fue el colofón a un fin de semana para no olvidar. El grupo donde se esconde el proyecto personal de ese alma errante que es Justin Vernon, generó una tempestad de belleza infinita para que todos nos pellizcáramos durante ese breve sueño de dioses que fue sentir su magnifica puesta en escena y el desarrollo de una obra de arte mayúscula.
No fue un concierto al uso, fue otra vez , el palacio, lo que fue,  una fundición.
Si Music from the Big Pink creo una arcadía, What Going On una liturgia, Rock Bottom un océano, Marquee Moon unas nuevas matemáticas , Grace una nueva forma de confesión, Deserter´s Song un bosque austral y Yankee Hotel Foxtrot la reinvención de la americana, Bob Iver ha publicado dos discos absolutamente ESENCIALES y un sonido totalmente propio. Como todos ellos, vienen un poco de un agujero negro, las constelaciones se suceden pero de repente hay un vacío sin luz de donde nace la siguiente, que en realidad trae los mismos brillos que el resto de estrellas y planetas de sus vecinas pero que son, al mismo tiempo, muy diferentes. Esos vacíos o mutaciones nacen de un genio y un talento que se dan de pascuas a ramos. Justin lo tiene.
Después del milagro de ayer sólo queda decir que lo enlatado comparado con lo fresco, nada tiene que ver.
La única manera de describir semejante acontecimiento es insistiendo en una palabra y un adjetivo: Belleza Infinita.
Al acabar , los afortunados que pudimos estar allí, nos abrazamos como un símbolo de victoria , de haber elegido la nave espacial que llegó hasta la luna, que no se quedó en camino, que te planta en un lugar donde olvidarte de la fealdad reinante, un refugio contra la tormenta,  a un estado donde no son necesarias las sustancias químicas u orgánicas para alterar las emociones,  donde con la misma piedra se esculpen tallas como las del maestro Miguel Ángel.
Ahora mismo la gira a la que hay que asistir, por la que hay que robar si es necesario, es la de Bon Iver.
Como Wilco presentando el Ghost is Born, como Arcade Fire en Madrid, como The National en Zambujeira, son experiencias vitales para contar a los nietos, para que figuren como hitos en tu libro de ruta del rock mayúsculo, ese que se reinventa, ese que sirve de psiquiatra, ese que habla directo del artista al fan, que te explica que merece la pesa seguir duchándose a las mañanas y  arrancar, pese a todo.
Los detalles no puedo explicarlos porque lo de anoche hay que sentirlo en el pellejo.

Me hizo una ilusión tremenda recordar esta reseña de su disco segundo y como aposté y gané.
Jamás veré algo semejante.La noche más estrellada.
Coco...de ti si que me acorde...


Re: Stacks from Mary Beltz on Vimeo.






6 comentarios:

  1. Joder, qué envidia.

    Yo también aposté por él (y también gané) cuando compré su primer disco por una reseñita que leí no sé dónde y por esa portada intigante que me llamó a voces.

    Discazo.

    Como el segundo. No puedo dejar de escuchar ambos desde hace un par de semanas, pensando que yo sólo podré disfrutar de lo enlatado y me perderé esa Belleza Infinita.

    Un abrazo Joserra me alegro de que lo disfrutaras.

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  2. Joserra, sigo en una nube!
    Trato de distanciarme, por si soy excesivo. Pero nada...
    Cosas como lo de ayer te hacen seguir creyendo en esto!

    Un abrazo

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  3. Increíble. Era de noche, ¡y se hizo la luz! Desde la profundidad de la cueva, que simulaba el escenario, el Mamut (simbolizado en el sonido de un instrumento de viento tremendo) nos invitaba a participar en aquel Akelarre a todos los que tuvimos la suerte de poder estar ahí.
    Lo comentábamos, las fechas son muy malas, es fácil perderse este concierto. Y, la verdad, seguiríamos viviendo (ojos que no ven, corazón que no siente) sin saber qué nos hemos perdido. Pero haber estado allí es fantástico y uno sabe que ese día no podía haber hecho mejor elección. Ver a un grande en su momento dulce es una cosa muy, pero que muy emocionante. Los abrazos no fueron sino la emociante expresión de compartir el subidón que experimentamos durante todo el concierto (mejor ESPECTACULO, porque fue TOTAL: sonido, luces, escenario...). Ayer también daba igual el setlist. Se dejarían cosas que a unos nos gustan y tal tema lo cambiaríamos por aquel otro, pero en el fondo daba igual. Nos tenían enchufadísimos. Su directo supera ampliamente lo grabado.¡Cómo mejoro en directo todo su trabajo previo al "Bon Iver"! Es verdad, que en la escucha de este último trabajo ya se puede imaginar un directo más sofisticado en el que se conjuga increíblemente la sencillez del resultado final con la complejidad de arreglos y la aportación multiinstrumental perfectamente sincronizada. Pero reflejar ésto en el escenario, aunque parezca imposible, fue nuestra experiencia inolvidable de ayer.

    ¡Qúe suerte que pudimos verlo!

    La próxima vez me los imagino en las cuevas de Santimamiñe

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  4. Un directo grandioso, tanto en sonido (perfecto) como en iluminación.
    Sin duda un regalo para los sentidos.

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  5. Qué noche más mágica.
    Compañero, que afortunados fuimos!

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Amo la música más que a todo.

Amo la música más que a todo.
Todos los textos pertenecen a Joserra Rodrigo salvo citas y párrafos con su autor referenciado.