Preguntaba la chavalería qué les daban a ese público para sentirse tan poseidos, qué clase de mortadela encajaban en sus bocadillos: yo creo que era el buen rock and soul, no hace falta más química ni proteina que lo que estos temas producen.
Para la quinta del Willie los Waka Waka eran los himnos de Mitch Ryder, su Carlos Baute era The Wicked Pickett y su Kayneeeee (puajj), James Brown...había donde elegir y era muy difícil equivocarse. Era como una inmensa caja de pastas recien hechas y bien surtida, de las que sacabas y no quedaba una en un minuto.Sin ánimo de ofender, esa posibilidad de diversión murió, resucitó algo con la new wave y los homenajeados pero después, ya nada.Ves estos videos y comprendes carreras.
Funky Broadway, Funky Friday landers!
El Exorcista!
La chavalería se da por contestada jajaj
ResponderEliminarNo ofende, es que es la verdad. Aunque a decir verdad, tampoco es que guste Carlos Baute, todavía no he conocido a nadie que le escuche, al menos que lo haya confesado. Es más o el rollo Fito/Barricada o el resto, rap, techno, Don Omar, esas cosas. Igual los que tienen algo en la mortadela son ellos, ahora que lo pienso... inquietante...
Si sonara música así en los locales estaría todas las noches de pingoneo, poseída por el diablo y viviendo a base de mortadela, quizás sea mejor así.
ResponderEliminarEstoy escuchando "Beautiful wreck..." for the first time. Por lo pronto "You gotta be a Buddha" suena que te cagas, me tengo que poner las pilas.
Besos!