UN FIN DE SEMANA DE CONTRASTES

Damien Jurado + Josh Rouse
(Gasteszena - Donostia, Viernes 8 Octubre)

Mike Farris & The Roseland Rythm Revue
(Antzokia - Bilbao, Lunes 11 Octubre)




Si hay tanta variedad de flores en el jardín será para que disfrutemos de todas y si hay cambios de clima bruscos será para que nos descoloquen y aprendamos a adaptarnos con mucha rapidez.
La noche del viernes quizás fuera una de las más cálidas del año en la Bella Easo y al día siguiente llegó el fresco a la meseta para el lunes encontrarme de nuevo en Bilbao con la lluvia y el chubasquero.
Como esos bandazos no puede haber artistas más distintos entre si que estos tres pero todos son r&roll porque nuestra divina música tiene más recovecos que la medina de Fez y eso es lo que le hace apasionante y agotadora y susceptible de divorcio express ante tanta cita ineludible.
Y los tres tienen una personalidad acusada, cosa que ya me atrae de por si.

El concierto del viernes en la sala Gasteszena fue curioso, de andar por casa, con amigos:

Damien Jurado es un alma solitaria que se hace escuchar en su timidez y allí estaba el fantasma de Nick Drake, de John Martyn y del Neil más intimista pero también pensé en qué gozada tiene que ser ver a JustinVermon aka Bon Iver porque Damien posée esa isolation de los mencionados y emocionó muchísimo al personal. Había un grupo de fans muy entregado y viejuno como el firmante, curioso de verdad.
Entrega, verdad y una pegatina en su Martin con Greg Brown, me conquistaron y aunque tengo tres discos de él , los primeros, voy a completar todos porque le perdí la pista cuando su tristeza comenzó a traspasar los límites de lo tolerable. Un talento más grande de lo que pensaba.
Igual fue que lo presencié sólo, todavía no habían llegado Coco y Benito pero me gustó y enseguida me ganó porque es un tipo grandón , buenazo a tope que se deja querer a la primera de cambio.

Después le tocaba el turno al Turista, al ahora valenciano de Nebraska, al Paul Simon de la new generation Mr Josh Rouse y yo estaba muy nervioso porque como tuve la oportunidad de decirle al final, en el chicharrillo del post-bolo, para mi él,  junto a Ron Sexsmith y Rufus Wainwright,  son los tres songwriters que más más me interesan y gustan.
Le doy siempre el bronce pero tampoco era plan decirle su puesto en el podium, hubiera quedado la mar de feo.
Su combo lo componían dos de Ciudadano, es decir dos Maderitas, al contrabajo y a otra guitarrita/guitarra y haciendo unos bonitos coros.
Polémica aparte,su último disco lo defendió de maravilla en una pose Joao Gilberto total, laid back, como le gusta decir al brother anónimo e "echado pa trás" como si estuvieramos en las colonias de verano y hubiera una hoguera entre el escenario y los presentes.
A mi me gustó de esa manera también,  aunque reconozco que no fue la misma luz de la estrella que puede llegar a ser y que su voz se resentía de algo pero su dulzura estaba ahí.
El repertorio un tanto corto juntó cosas de 1972 ( las más) con sus eternas Quiet Town o de bis It´s the Night Time y por supuesto, tres de su último trabajo. Perlitas para mi collar de los directos sin pretensiones, sencillos. Yo traté de bucear entre los eternos cuchicheos y estuve en primera línea a todos los niveles; así mantuve una conversación imaginaria e íntima con su música, la juerga la dejamos para cuando venga a Bilbao con una banda en condiciones, eso me prometió.Amo sus discos y sus canciones y él parece uno de los chicos pijitos del Cole de Jesuitas pero es un tipo encantador. Me acordé de Fede y de que le hubiera gustado aunque supongo que estando Murcia más cerca de Valencia habrá tenido la ocasión de disfrutarle en más ocasiones.
Benito y Elena lo disfrutaron a tope y Coco y sus colegas también aunque la cara roja se nos puso a todos con el "camarero ponme un Kas" en ese homenaje involuntario a Georgie Dan que es el tema Valencia, a algunos de gusto y a otros de vergüenza.
En otros temas como Las Voces o  I will live on Islands reivindicó que él estaba antes que los Vampire Weekend para defender la importancia del Graceland y demostró que conoce a Vinicius Cantuaria ( se lo pregunté después) y la música cubana. Ganaron mucho en directo con un aire La Bamba-Paul Simon super vacilón ya que no estamos en este Mundo para comernos el tarro continuamente joder...El tio se iba al día siguiente a Sao Paulo y ya le dije que no dejara temblando los cajones de bossa nova d elas tiendas de discos.
En el bis el detalle de sin micros , les mosqueaba cómo sonaban los monitores, fue todo un lujo para los presentes...esos detalles rítmicos y olores a madera que sólo las guitarras Martin encierran, esa voz sin pasar por la electricidad tan bella aunque tan débil, esa cercanía.
Si me tengo que quedar con un momento puede ser el del vídeo que cuelgo o el Streetlights o el Flight Attendant ya que mi flamante y también pijo nuevo iphone 4 hace unos videos de padre y señor mio y se vuelve, a partir de ahora,  en el complemento perfecto para el reportero Rodri.

En resumen, de esos conciertitos discretos que ganan en el recuerdo por auténticos e improvisados y me recordó mucho a su amigo Ron en el formato en que vino a Bilbao.!Bravo Josh!


 

Y el lunes la gran esperanza blanca, del que la blogería habla sin parar, el pálido fantasma sureño que viene a redimirnos de nuestros pecados: Mike Farris y su super banda.Con su sombrero y sus rayban y camiseta del garito Antone´s de New Orleans (cómo me recordó al último Gram Parsons en estética) mantuvo el control y la alegría hasta el final.
Un tipo currante como pocos , con una voz dorada de tizona gospel-rock que se ha producido una gira-misa de hard gospel impresionante pero que la Parroquia llamada Antzoki no es sitio para tocarla porque el recinto será mítico pero suena fatal.
De hecho, en el tema con su guitarra color cereza de su antiguo grupo es donde consiguió ponerme la carne de gallina porque conseguí oirle todos los matices de su prodigiosa voz. Me acordé del Soulbro y de que él por muy fan que sea, hubiera sido crítico con el sonido y con ciertas tendencias auto-indulgentes pero comprensibles en un show para entretener a la peña.No veas cómo bailó a la izquierda del escenario un tipo recien bajado del caserio en plena posesión digna de los blues brothers...estaba claro que era  puro eusko label porque aquello se parecía más al movimiento de Leonardo Dantés que otra cosa, sólo le faltaban los pañuelos.
Apuntes aparte, allí hubo mucho sabor a clásico del género, las Sisters super puestas no sé de que y un grupo impecable que le daba el backbeat de Nueva Orleans a todo lo que tocaba...y ver en Bilbao este tipo de shows es tan difícil que era una ocasión para no perderse.El teclista soberbio y auténtico director de la escena y el Farris un animalote de las tablas cuya voz ya sé por qué le arrebata al Cava...tiene mucho en común con Terencio Tren D´Arby, esos agudos gatunos inconmensurables que hacen que acuda a Sam Cooke ( A change is gonna come , Ain´t that Good News) y lo borde.
Si este bolo lo vemos en la Sala Santana hubiera sido otra cosa pero ese volumen tan alto no lo permiten las paredes de hormigón del teatrillo referente de nuestra Noble Villa, ya que rebota todo  y se pierden graves a montones y el gospel sin graves no es gospel.Quizás también fue que me puse arriba y odio estar tan lejos de escena pero es que aquello estaba totalmente petado.
Ellos dieron una lección de lo que James Brown se inventó: ser unos hard workers del rock and soul business y el homenaje a Solomon estuvo toda la noche flotando en el viento porque se empezó y se acabó con Everybody Needs Somebody To Love, como mandan los cánones y ser agradecido con los .

Cambios de tiempo, distintas flores, buenas compañias, la vida en todo su esplendor.


Momento un alma y una guitarra: de lo más emocionante que te puedes echar a la cara.