PECADOS Y VIRTUDES DE LAS BOXSETS

No debo darlo todo por escuchado, ni por tenido o por emocionado...El tiempo siempre te enseña y sorprende, sobre todo cuando hay una labor de amor detrás de una edición, eso se nota.

Yo de estos dos grupos, The Band y The Kinks ,mis dos preferidos con diferencia, tengo todo o eso pensaba yo y estas cajas me dieron pereza en su momento, más que por la pasta (me pueden birlar ambas "marcas" lo que quieran) por que son boxsets... si, si, son muy bonitas, tienen textos que te dejan absorto y decoran un montón en casa como se puede comprobar pero no se escuchan tanto...constituyen un ritual , son como una cena especial con velas y atrezzo y desgraciadamente, no tenemos tiempo suficiente para disfrutarlas a tope.

A veces, he aprovechado salidas o viajes cortos para llevarme una y empaparme de ella como mono-tema impuesto, asociándolas a ese lugar, siempre con buen recuerdo.

Y luego está esa máxima de que a quien más quieres menos atención prestas.Qué cosa más cierta.

Hay otras cajas revelatorias y que sustituyen, como la de Big Star, a las cutre-ediciones anteriores de sus trabajos, hay muchas en Soul , sobre todo, esenciales (Stax, Atlantic, Motown...) por su función compiladora, otras con valor por si mismas Unheard de Cash o las Bootleg pero la mayoría son más de lo mismo, eso si, en precioso.

Si es cierto que redimensionan la importancia de los aritstas y se ve su legado como en una película pero, no nos engañemos, es difícil visionarla de seguido y picoteamos de aquí y de allí.

Pero qué gozada son esas breves inmersiones.

Hace bien poco que me he hecho con las dos de la foto y para justificar la frase con la que comienzo, han sido más sorprendentes de lo que imaginaba.

La de los de Muxwell Hill porque demuestra su grandeza, la prefiero a la tan cacareada de los Beatles porque hay tanta verdad y tanta genialidad desconocida incluso para el fan:

por ejemplo, el "I got to sleep" que hiciera famoso la señorita Hynde es algo que vale su precio total...qué cosa tan moderna, adelantada y melódica aunque sea demo.

Y en el caso de los canadienses esos vídeos del último dvd es como ver super-ochos de los mejores años de tu vida que no imaginabas existieran, ese San Richard marcándose un "Georgia" en el que llora literal.

Luego está como huele el cartón, la memorabilia retratada, el tipo de letra que utilizan, los agradecimientos, como les quitas el polvo, las frases míticas destacadas en el libreto, una foto de Bob y The Band a doble página en un gimnasio que sirve de camerino en 1974 que me quita el "sentio"...tantos y tantos detalles.

Estas dos son como un álbum de recuerdos, niquelado y con sólo un ratito de manoseo ya te sientes feliz como el día de reyes, son la mejor de las farlopas para adictos like us pero lo mejor con ellas es la intermitencia no el empacho: vienen y van como las olas más altas del mar que te arrastran, te refrescan, te ponen las pilas y te recuerdan que nunca olvides que en tus baldas hay mucho agua pero sólo unas cuantas y majestuosas olas, esas apreciadas boxset que tienes ordenaditas y que tus doblones te han costado.

Un día dijo Anónimo E que podría vivir en la discografía de los Kinks...yo también...bueno no...me gustaría tener de residencia de verano, por ejemplo, esta caja de los Kinks y de invierno la de The Band. Y como dirían las Vainica...vivir encerradito en las dos temporadas, ahí metidito como otro elemento extra del pack.No me importaría nada.


Nota: como jode sacar los cd de algunas de ellas...parece que los han metido y pegado con silicona al cartón...jajaja.