viernes, 28 de mayo de 2010

EMPECEMOS POR EL FINAL, "EL MUELLE"

Tres días, tres días antes del accidente de avioneta...grabó el gigante esta canción del "Everest"
Like a Rolling Stone, What´s Going On, A Song for You, In My Life, A Change is gonna Come, People get ready ,Symphaty for the Devil, Waterloo Sunset...son algunas de sus compañeras.
Parece mentira, lo que es la vida y la muerte, ambas caprichosas para todo hijo de vecino y no nos damos cuenta para quitar esa mala hostia que nos gastamos algunos días de que Otis Reeding grabó "Dock of the Bay" un jueves y murió ese mismo domingo...Increíble y sumamente injusto.
Con 26 años no se podía haber llegado tan lejos. Como John Landau confesó: Otis Redding era puro rR&roll, de ahí que la palabra más acertada para englobarlo todo sea esa.Amen.
Tras su experiencia en Monterrey y soñando que de ahí iba a surgir un Mundo mejor...el compuso ese folk-soulito que nadie ha conseguido mejorar, ni acercarse a lo sumo, es ese tipo de canción SAGRADA que no se toca y que además es la única junto a la de Sam, póstuma de todas las de la cima.Él no tenía claro que era aquella gloria que había inventado, imagino pensaría que era un souvenir que se trajo de Frisco sin darse cuenta que inventó algo nuevo e irrepetible en sólo una canción. De ahí se derivarían carreras...Al Green, Bill Withers, el propio Richie Havens pero por muy maravillosas que sean, nada en ellas iguala a Dock of The Bay.
Una canción manoseada por los Media de los noventa y los dosmiles más que por los artistas...pero que si te abstraes de esa sensación chunga de hilo musical de hotel que adquieren estas utilizaciones, es un diamante.
Es más si la utilizan los cabrones es por eso: atrae tanto al idiota en bermudas de vacaciones en el resort del Algarve como al enterado que tiene 800 discos de soul.Y eso es el mérito de los grandes de la cultura popular, no convertirse en malditos. Y queramos o no eso es lo más difícil, ser genial y popular es difícil, hay que currárselo un montón...que se lo digan a Bruce que es el Otis blanco(por muchas razones que se trataran en una entrada aparte)
Menos mal que el pobre no tuvo tiempo para comprobar que el sueño hippie, que a él le dio el espaldarazo y le metió en el circuito blanco, no acabó en nada concreto.
Y quiero que sirva esta entrada para que discutamos estos temas y podamos dar puntos de vista pero mientras, escuchemos con otros oídos el sonido de gaviotas de los armónicos de la fender de Steve...que quizás sea una de los arreglos más bonitos y mágicos de la Historia.El "Muelle" es el "Muelle"

2 comentarios:

  1. Cuando se siente la música como la sentía él solo se puede transmitir eso: Soul. Él no cantaba, emocionaba. El señor Cropper (¡vaya guitarrita!) dice que ha trabajado con muchos pero que como con él ... Cuando me siento en el muelle de mi pueblo, la marea me trae cada palabra del gigantón, cada sílaba, esas notas sostenidas recorriendo mi alma. Desde luego Georgia lo echaría mucho de menos cuando partió para Brisco Bay. Nosotros también.

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  2. Morir silbando, siempre será el Rey. Saludos.

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Amo la música más que a todo.

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Todos los textos pertenecen a Joserra Rodrigo salvo citas y párrafos con su autor referenciado.