lunes, 7 de julio de 2014

ESTHER PHILLIPS-BABY I´M FOR REAL-4 CLASSIC ALBUMS 1971-1974 (RAVEN-2014)



Siempre ha sido un engorro eso de ser aficionado al soul y descubrir el difícil pero apasionante arte de manejarse con la maraña de ediciones y el guarreo del mercadeo que ha existido con el oro musical negro. Además, suministrado a cuenta gotas y muchas veces, en formatos infames tanto en cd como en vinilo.
Desde aquel sello Charly o Edsel (nostalgia de los primeros 33 rpm pillados en la Libreria Universal de Bilbao)  hasta los cds de Collectibles, ha sido el sello btitánico Kent y Ace Records quienes han representado y lo siguen haciendo "como se deben hacer las cosas"
A los que amamos el original nos gusta que se le trate como una obra de arte.

La gran dama del soul canalla, Esther Phillips, la "madre" de Amy, siempre fue complicada de comprar y de completar: era un lío allá por los noventa tratar de hacerse con su discografía de una manera normal, como si se podía hacer con Aretha o con Otis pero es que ella era una cornuda de lo más loser y estuvo en varios sellos y lo poco que sacaba de ellos, se lo bebía o jugaba al bingo.
Como buena perra del soul que es ( como su amigo Swamp Dogg con el que, cómo no , hizo un dueto porque dios los cría y ellos se juntan) nunca ha sido bien tratada en lo que a ediciones de su obra se refiere.Todo está totalmente desperdigado.

Lo primero que me agencíé fue de su época Atlantic, la segunda etapa, después de ser Little Esther y pegarle más al duro rblues y fue con un doble cd con libreto que es el imprescindible y bellísimo (una excepción) , The Best Of Esther Phillips (1962-1970) Ahí hay cosas de cortar la respiración como su cover de Dylan de Tonight I´ll Be Staying Here With You o el Crazy Love de Van The Man.
Luego tiré para atrás y después para adelante: su etapa setentera, la de Kudu, subsello de la CTI Records de Creed Taylor, siempre imposible de echarla el lazo salvo que te dejaras la pasta en esas reediciones japonesas de cartón y alfabeto ilegible.

De repente, hubo una reedición de varios de sus discos de esa época, madura y brillante, menos southern, más funk-jazzy-cool-blues, de sonido impresionante y mercurial pero, imagino que por problemas legales, se quedó fuera de la tanda su POM de 1972 From A Whisper To A Scream. Un horror, qué asco me daba una copia tostada que le hice a mi amigo Jorge ( que si había pasado su visa por el país del sushi) de semejante menina, con mi portada casera en la que se notaba que a la impresora le quedaba poca tinta...Yo quería el original.Ya me la he quitado de encima.

Por fin, en este 2014 tenemos a Raven , salvándonos la vida. Se trata de un sello aussie que rescata aquello que por razones demasiado complicadas se cruza en lo que a reedición se refiere y que amamos todos los aficionados (a mi copia de Aretha Now en vinilo me remito,  que es de ese sello aunque ahora ya lo haya reeditado la Atlantic en 180 grm. de noble material)  
Otro ejemplo de eterna súplica era el The Show Must Go On de Sam Dees que por fin y hace bien poco, se hizo realidad, aunque esta vez fuera la propia Atlantic la que se decidierá por rescatarlo y como dios manda.

Pues bien, este disco doble cuyo título ilustra esta entrada , recien editado, se reunen cuatro discos notables y el primero sobresaliente de la cantante con el vibrato más hiriente y verdadero que ha pisado la faz de la Tierra, una Bobby Bland con cromosoma XX, solapándose en el tiempo a carreras como la de Donny Hathaway o cualquier otro soulero/soulera de esos que califico de vitales para respirar.

Ya lo tenemos aquí y es realmente un cofre, aunque sean dos cds, porque está bien cargadito de piedras preciosas aunque la portada tampoco es que sea un primor pero si el libreto y la info. Y nos damos cuenta de que si sigue siendo cierto eso de que From A Whisper To A Scream es su obra magna, period, si bien todos los discos juntos tienen el mismo tono, es decir, los cuatro son esenciales.

Su estilo definido, de blues de tonos jazz pero marcada base soul, hace que sea un festín que hay que engullirlo de manera intermitente, dejar que las canciones se expresen en momentos aislados de tu vida porque sino puede llegar a parecer demasiado uniforme todo el esquema salvo la equilibrada POM aludida que lo abre.

Por ejemplo, maravillarse con la cover del Use Me de Bill Withers, como la cambia el groove o ver que Amy Winehouse escuchaba a la Phillips en sus noches de cold turkeys y resacas infernales con su maromo imbécil en prisión.
Y es que seleccionaron tan bien el cancionero para estos discos...

Aretha le ganó el Grammy pero reconoció en su discurso que Esther se lo merecía más que ella. Era por la canción de Gil Scott-Heron "Home Is Where The Hatred Is", que es sublime aparte de dura como pocas porque habla del cuelgue por las drogas a las claras.

Lo que llama la atención son sus fraseos descarnados, llenos de dolor y sufrimiento, filtrados por su colador de gran corazón maltratado, donde Mr Bojangles o Such A Night las hace propias y mantiene la llama olímpica de Dinah Washington y Billy Holliday en el arte de la contranota y el vibrato.
Como si se hubiera bebido una tonelada de barriles de alcohol con hielos de abandono y desprecio, así suena la voz de Esther Phillips.
Escuchad I don´t want to do wrong, todo un monumento del cante jondo de mis cornudas souleras, donde en realidad aunque te diga que no te quiere hacer daño, ella es incapaz de hacerlo, lo interpretas a la inversa: que la deje en paz ese pedazo de cabrón.
En fin que me pone la carne de gallina y que corto y cambio y el resto os lo dejo para vuestro descubrimiento.
Los músicos no pueden estar más brillantes y el sonido no puede ser más acertado y nítido, Están Richard Tee, Bernard Purdie, Cornell Dupree, Hank Crawford, George Benson, Maceo Parker, Ron Carter, Billy Cobham, Michael Brecker, Steve Gadd, Eric Weisberg, Bob James, Airto Moreira  entre otros porque si cito a todos acabo mañana y Pee Wee Ellis a los arreglos, es decir, dioses, los mejores músicos de la época, dándolo absolutamente TODO. No hay palabras para describir semejante banquete de gusto, feeling y servicio a un alma rota y llena de carbón ardiendo que reinterpreta las mejores canciones de su época, las que transitan por carreteras secundarias pero con el tiempo ves que deberían ser de peaje eterno.

Un disco al que le veo muchas influencias de esta etapa de la diva, aunque os parezca que me he tomado una buena dosis de peyote, es al Common One de Van Morrison, también a los Steely Dan y por supuesto al Back To Black de esa chica de Candem que era hija putativa de Esther Phillips, hijas del puteo, verdad descarnada, porque soul is the answer and soul is real.

Esther Phillips is for real. Una de las mejores cantantes de todos los tiempos que por fin tiene el trato que merece de uno de sus periodos imprescindibles dentro de su generosa carrera.

El turco Ertegun, capo del sello Atlantic, que no creo que fuera idiota o ganapán dijo que era una de las mejores cantantes que había escuchado y mira qué escucho cantantes."She was a singer with extreme soul" fue su frase de remate.

Reedición del año, no os la perdáis que no es nada cara, brothers or sisters!

6 comentarios:

  1. muy pocas cosas de la Phillips no merecen la pena. Un abuena notica esta paarción de su trabajos algo más crepusculares pero a mi gusto bastante brillantes. No tenía noticia de la reedición pero es que e el mundo del soul uno anda perdido con ese tema . ya no sabe que ignoto single falta o que temas trae cada constatnte edción de discos. me lo pillare

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    1. De la Phillips como el cerdo, se aprovecha todo porque es como Nina Simone, fuente de emoción aunque te cante el listín telefónico entero. Exacto Bernar, esta época es digamos, la pre-crepuscular, la madura , la putoámica total y reunir sus cuatro discos sublimos en un doble con notas , con músicos referidos, etc... es un primos. En la balda reservada para nuestros lujos. Gracias por tus siempre preciosos comentarios, soul is the answer.

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  2. Apuntado (y subrayado en fosforito) queda: siempre atento a las recomendaciones de "mi" Peter Guralnick del 'botxo'.

    Abrazos.

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  3. Querido agente, es la típica edición cinco jotas, no te vas a arrepentir, bajarse esto de un rapidshare es no entender para nada de qué va la entrada y tú lo sabes muy bien.Esther Phillips como el ya injustamente difunto Bobby Womack es una leyenda.Un abrazo gigante.

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  4. ¡Hola, Joserra! Llevo bastante tiempo leyendo tu blog, de los que más me gustan, por coincidir habitualmente con mis gustos, y por el entusiasmo con el que escribes. Además, puedo descubrir músicos que no conocía, como Esther Phillips, a la que he estado escuchando en internet y me ha emocionado. He ido a comprar la reedición, y me dicen que no está editada aquí. Tampoco tenían otros discos, claro.
    ¿Solo se puede conseguir por internet? ¡Muchas gracias!

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    1. Estas cosas Alberto me desarman. Tenía pensado dejar el blog ( temas de salud y ansiedad, recuperar espacios, no tomarse todo tan a la tremenda) pero cosas como esta me recuerdan que no debo hacerlo.Mira la única forma de compralo es por amazon.es. Es muy fácil. Gracias por este comentario, me ha dado vida, se trata de compartir para dialogar y para transmitir y tú lo has hecho. Un abrazo gigante,

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Amo la música más que a todo.

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Todos los textos pertenecen a Joserra Rodrigo salvo citas y párrafos con su autor referenciado.