jueves, 30 de enero de 2014

MARIA IS THE ANSWER


A veces, algunas veces la cantora tiene razón. Te das de bruces con algo espectacular en "el tubo" y piensas por qué no estare escuchando más a mis heroinas, las de siempre, las mujeronas que lo transmiten todo, sin trampa,  sea cual sea el color de su piel.
Cuando salió Alabama Shakes todos alucinamos con la voz de su cantante o ahora con la Tedeschi pero ....ay...siempre hay un antes y una leyenda anterior. Siempre hay una mujerona ante desde los tiempos de Bessie Smith  o  de la "Piriñaca" Una mujerona que lo ha dado todo y se ha destapado entera.

Si tengo que hacer una selección de videos para la isla desierta, éste me lo descargaría seguro. Os pido antención , esto es una entrada corta, dejándome de rollos, al turrón y a escuchar esta interpretación que es de gritar de antológica: reune las carácteristicas de Aretha y Van Morrison, de Dusty Springfield o Betty Lavette, de Janis a Barbara Lynn o la Señorita Hynde.Todo en uno, soul is the answer.

Señoras y señores, con todos ustedes la grandiosa Maria McKee , una de las voces más grandes de toda la Historía del Rock, acompañada entre otros por Gary Louris con una chaqueta tres tallas más grandes y melenón noventero pero con su SG precisa y preciosa.Passion is no ordinary word.

3.800 visionados y 800 mios. Rídicula cantidad para semejante hazaña. Sólo por esto Maria Mckee (Lone Justice) tenía que estar en el Hall of Fame. 


sábado, 25 de enero de 2014

SHINING ON EVERYONE-THE FAKEBAND


En ese tonto y mágico momento
cuando estás profundamente enamorado de una banda
y sus acordes y armonías
te suenan como un río cantor
piensas en una autopista desierta
conduciendo un coche descapotable
interpretando el papel principal
de tu propia road movie
dentro de sus canciones,
brillando en todos y cada uno.

Las emociones son lo suficientemente fuertes
para hacerte pisar el acelerador
pero nunca bajes la guardía,
las guitarras suenan como truenos
para mantener el miedo a raya
tratando de retener aquello en lo que crees
y las melodías brillan
como rayos púrpuras del crepúsculo
filtrados desde el estéreo al corazón
brillando en todos y cada uno.

El solitario viento del hammond 
remueve cualquier atisbo de duda
contándote de nuevo que nuestro destino eterno
está siempre en movimiento,
los ecos de la sección de metal
te recuerdan aquel loco verano indio
donde todos los problemas pueden solucionarse
donde todos los fracasos significan cambios
y las confidentes nubes del otoño dorado
lo convierten todo al rojo en la aurora,
brillando en todos y cada uno.

Este coche es ya tuyo
recien sacado de la cadena de montaje
Hazte propietario,
no vas a necesitar bajar las ventanillas,
decide lo que significa para tí
y como suena
Estas preciosas canciones son rugidos de motor
como  metas en una carretera sin final,
brillando en todos y cada uno.


Liner notes traducidas al castellano de 
 Shining on Everyone-The Fakeband (Rock Indiana , 2014)

Joserra Rodrigo, Enero 2014.


Foto de mi amigo Eneko Garcia Ureta de Rock in Focus, el Elliot Landy de The Fakeband.

THE POET´S DELIGHT


Resulta dificil hablar de una manera un poco lógica y ordenada de una banda y una colección de canciones en las que a un nivel secundario, has tenido un papel en su proceso de gestación/embarazo/parto, aunque sólo sea como un simple espectador privilegiado con carnet de hooligan preferente.

Nada me ha reportado más satisfacciones roqueras que todo este excitante proceso. Contribuir, redactando esas liner notes o pequeña introducción ha sido, además de un tremendo honor, una necesidad vital y ellas lo dicen todo sobre el efecto revitalizante que el nuevo disco de la banda de Getxo ha tenido en mi persona en un periodo bastante desbaratado. 


Fakeband y su Shining on Everyone (Rock Indiana-2014) me han devuelto ese algo en lo que creer, volver a ilusionarse y lo más importante, en lo que confiar.

Shining on Everyone es un disco lleno de fiesta, fiesta de las emociones y del rock and roll, así, por la cara con el efecto cosquilleo de un viaje en montaña rusa.


Es imposible ser objetivo con éste segundo disco de la banda de Getxo, como podiais sospechar, pero mi pasión y toma de partido más que favorable que no os lleve a no creerme; la música sólo la concibo desde posiciones individuales que muchos tenemos a bien compartir, como estoy seguro va a ocurrir con este magnífico chute de adrenalina vital sonora que tanto necesitamos en tiempos pérdidos y oscuros. Queremos CANCIONES, en mayúsculas, bien tocadas y con alma propia que nos cuenten historias y en esta casa, siempre lo digo, gustan aquellas que suenan con vocación de eternidad.

Tuve la suerte de conocer a los que cariñosamente llamaba, hasta hoy, Eagles de Getxo (ahora ya son sus Beatles o sus Big Star) a principios del 2011, como teloneros de Willie Nile y ese día, os lo puedo asegurar, el cielo cambió de color. Si ya era un apasionado de mis grupos y artistas, casi siempre extranjeros, multipliqué por tres los valores en el test analítico de dicha caracteristica personal, no muy saludable para la tensión arterial como he podido comprobar pero que, desde luego, me ha reportado muchas más alegrías que penas.
Más vale disfrutar que pensar en hacerlo y Fakeband me han hecho gozar con sus canciones y directos como pocos lo han conseguido y hacer trabajar a mi corazón a un ritmo más frenético de lo normal.

Si no es por ese día, en el que a la emoción de ver por primera vez en directo a uno de mis poetas de la Fender y Nueva York desde que era chaval (ese pequeño gran hombre llamado Willie Nile) se sumó la de escuchar a los mejores teloneros posibles, no se hubieran derivado muchas cosas que nacieron de manera espontánea.
Fue un tremendo flechazo y los cinco componentes de ese grupo vivian a solo unas cuantas estaciones de metro de la mía, no en Nueva York, Luisiana o Londres.

A partir de ese momento, siempre he tratado de meterles en berenjenales y siempre me han dicho que si, sin poner ninguna pega y con un comportamiento ejemplar.

En la fiesta del 70 cumpleaños de Dylan de la Sala Cúpula del Teatro Campos de Bilbao (una de esas noches de mayo calurosas y sublimes,  affairs de las camisetas y comportamiento de la Sala hacia nosotros incluídos) 

En el IV Rust Fest Tributo a Neil Young del pasado verano en la ciudad medieval de Frías (Burgos) donde lo dieron todo en un set en el que los niños y los más mayores, les escuchaban embobados, como pasa con los grandes. Su actitud de querer disfrutar y , a la vez que los demás disfruten ,sin exclusión, no de manera sectaria, se notó y mucho.

Pienso ahora, a toro pasado, que a medio plazo, esas dos enfrascadas les han supuesto más beneficios que pérdidas en su cuenta de resultados porque aparte de ganar amigos y generar red de la buena, profunda, les ha hecho crecer como banda desde su ya excelente primer trabajo Too Late Too Bad que a mi, hasta llegar éste Shining on Everyone, me resultaba insuperable. Además, por supuesto, de sus propias vivencias personales, preparar repertorio de Bob Dylan y Neil Young con su propio enfoque es lo que tiene, ir a la fuente del manantial más puro.

A sumar o multiplicar al C.V. su mítica participación (dos veces) en ese más difícil todavía que es atreverse a interpretar parte del repertorio del The Last Waltz de The Band en el excepcional y todavía vivo Ciclo Izar & Star y su conexión con Mikel Muñoz, el autor del libro sobre The Band y otro gran amigo para la cuadrilla. 
Para esos dos legendarios pases,  no encuentro los adjetivos adecuados, quizás porque fuera un sueño verles cantar Caravan o The Night They Drove All Dixie Down la misma noche pero lo hicieron y de una manera sobresaliente.

Todo ese caldo de cultivo que da su generosidad, divertirse y divertirnos, la mutua confianza, esa que no conoce de ninguna contraprestación sino del mero intercambio del amor por las canciones, ha dado como resultado que se haya generado, entre otras cosas, esta especie de comuna entre nosotros los bloggers ahora también fans de los Fakeband y que se hayan producido lo que llamamos nuestros momentos mimosin blues junto a ellosAlgo parecido a las chispas que saltan entre nosotros cuando toca hablar de grupos como los Jayhawks.Ustedes me entienden.

Introducida la cosa y soltado todo este rollo, debo decir que Fakeband ya no son lo que eran en Too Late Too Bad, han ensanchado mucho su cinemascope. Primero, porque no han caído en el estúpido error de la repetición de esquemas que hubiera sido muy fácil e incluso bienvenido y segundo, porque nos quieren decir con Shining on Everyone que ya llevan desde chavales haciendo muchas bodas y tocando a los Beatles y a los Creedence, sin mirar las letras y acordes en el atril, desde el corazón, aparte de sus múltiples proyectos, grupos y homenajes, todos dentro de la rica escena del rock and roll Made in Uribe Costa, nuestra west coast. Se aprende y se crece tocando juntos, haciendo bodas, acudiendo al manantial y  metidos en el berenjenal.

No es que hayan ganado en cuerpo y alma, que también y mucho, sino que ahora es mayor su compenetración musical, los logros en composición del autor de las canciones Txomin Guzmán (un grandisimo talento), la destreza y sorpresa en los arreglos y todo su sonido en general. Ya no hay dudas aunque antes fueran casi imperceptibles.

Shining on Everyone llega a nosotros como un meteorito, algo realmente extraordinario en el panorama de los escasos grupos del Estado que adoran la tradición de lo que todos tenemos como iconos en la Historia del Rock and Roll en su vertiente de corte clásico y elegante (ahora quiero recordar a los maravillos All La Glory de Sevilla) pero, abarcando otros palos que en el fondo siguen siendo algodón orgánico 100% Fakeband, producto de cinco músicos integrales que forman un todo indivisible con un gusto único, es sus dos acepciones, sabor y elegancia.

Shining on Everyone es un disco donde como decía Antonio Vega "suenan guitarras", esa es su nota esencia. 
La profesionalidad pero a la vez frescura con la que están grabadas e interpretadas sus once gemas, realmente asusta. 
El producto que sale del estudio de Saúl Santolaria (Sweet Saul Music- Hats off Saul)) te hace concluir  que estamos ante el disco de una vida, un hito doméstico pero un hito, ante nuestro Abbey Road, Big Star Nº 1 Record, Sky Blue Sky o Temple Beautiful pero esta vez jugando y ganando el partido en casa, con la afición totalmente entregada al equipo local.

Si en Too Late Too Bad gravitaba, en todos sus cortes, la sagrada herencia del country-rock, en Shining on Everyone destaca la variedad de estilos, desde el power-pop urgente hasta el country soul festivo pero sobre todo el rock and roll que es una palabra que le va como un guante.

La sección de ritmo (Juan Uribe al bajo e Iñigo Gil a la batería) late esencial por todos los surcos, ambos están fabulosos; "suenan guitarras" (Pit Idoyaga, Alfredo Niharra y Txomin Guzmán) ardientes y antológicas y siguen ahí las armonías vocales marca de la casa pero de una manera mucho más sutil, escondida, bella, una especialidad difícil donde las haya y en la que son reyes. Intentad hacer coros en armonía y veréis lo difícil que resulta, más tocando una guitarra a la vez.

La voz de Txomin ha ganado en confianza y confidencia, es más potente y soulera, siempre arropada por todos los demás, graciosa como el Bruce o el Graham Parker joven, atreviéndose con registros en falsete alto sueltos, hirientes de amor y bellos como los de sus cantantes admirados.

Aparte, están los músicos invitados con la aportación de un Hammond incisivo y tocado con maestría, de los metales en tres temas (eso me cautiva) y los demás instrumentos, en una participación estelar, de lujo, de una gran categoría

En cuanto a las letras, comentar que siguen el hilo conductor de que siempre hay que pensar es que nada se viene abajo del todo y que siempre cabe recuperar el brillo perdido desde las ruinas en las relaciones y que el tiempo todo lo cura y lo deja en su sitio. Nuestro destino es el eterno movimiento del mismo.Desde luego es un disco de optimismo ante la adversidad, de darte la patada en el culo para que te espabiles y sigas adelante.

Estamos hablando de un Gran Reserva, a poet´s delight, Shining on Everyone ha llegado para quedarse para siempre, brillando en todos y cada uno de los participantes del milagro y de sus destinatarios.


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En otros tiempos, leíamos críticas de discos sin haberlos escuchado y fantaseamos con las posibilidades que brinda la imaginación , a la que ya tan poco espacio dejamos. Era una gozada. Ahora todo el mundo tiene bajados los trabajos de los artistas mucho antes de que se publiquen pero en el caso de Fakeband y su Shining On Everyone han sido muy celosos en el proceso de esperar a la fecha de publicación para que se escuche el disco en todo su esplendor y en el formato adecuado aunque en directo hayan tocado varios de sus temas. Así es como deben hacerse las cosas, generando expectación y ya demasiadas ganas.

Os propongo pasear por su setlist dando mis impresiones y trabajando con referencias que no prejuicios como cuando se describen vinos de una gran añada sin haberlos el resto catado o la experiencia de un viaje a una ciudad hermosa a alguien que va a visitarla pero de nada sirve hasta que hagáis este coche descapotable de vuestra propiedad.

Cara A

Top of the World

Fue el primer tema que escuché del disco y sólo puedo describirlo con una frase que soltó mi darling companion cuando la escuchamos por primera vez en casa: Joserra...parece que fuera hecha para ti, es una canción que reune todo lo que te gusta. 
Ella no es de muchas palabras, lo sabéis los que la conoceis pero, como todo lo que decía su difunto padre, lo que suelta suele estar bien procesado resultando demoledor.
Fue entonces cuando recordé cuanto le he dado y le doy la matraca, por poner dos ejemplos, con canciones de Chuck Prophet como Inside Track o el Shock and Awe o el Near You de los Teenage Fanclub, cuando le pongo en non-stop un tema y padece mi obsesión que se convierte en suya porque ya sabemos que todo se pega y más si duermes en la misma cama.

Top of the World es ese tipo de trallazo power-popero maravilloso, lleno de guitarras saturadas ala Zuma, como Don´t Cry No Tears, con una melodía incrustada para los restos y un romanticismo que ahoga, shining on everyone  es una frase de su estribillo en su momento culminante, un rayo de felicidad plena.

Una estrofa y un estribillo clavados, paradiña y el bombo que vuelve a liar la madeja de la electricidad hecha verso en su riff memorable: la canción de pop de guitarras redonda y en mi opinión, la cima de Fakeband.
Un 10 en composición, otro en interpretación y un 11 en eléctrica emoción.

Una primera estrofa que ha descrito el proceso personal de mis últimos meses:


On the run most of the time
Worried getting ready to die
But now its time to stop
Let it all go
Waiting for the spring or the fall
I couldn’t take it any more
On the winter in the cold
Lo and behold!

When the sky falls down
Shining on everyone
When the sky falls down
I’ll be seating on top of the world.

Top of the World es por donde había que empezar el disco, estaba claro , como el Damm the Torpedoes lo hace con Refugee, bravo, directa para mi songbook. Suenan guitarras.


Fool Me

Guitarras troteras, desparpajo e historia que contar de la humillación sufrida de parte de la chica de turno que te ridiculiza y te vuelve loco.

La letra es preciosa con versos como el inicial acompañados de la melodía perfecta que dicen:

The trees on the sidewalk
dance to our music
As we pass walking by
The stars are all shining bright
Making a poet’s delight

O decir la palabra shipyard en una canción, cosa bonita....como la pronuncia el amigo Txomin.Todo esta en los detalles.

Found me hard job
down by the shipyard
Honey just to buy you things
Ready to swallow my pride
Break my back and comply

Las guitarras cantan durante todo este paseo por los Campos Eliseos, se besan, se doblan para después pelear con una sencilla pero eficiente call and response con la sección de metal a lo War on War. Un aire chic ala Rumours de los Mac, otro disco que me viene a la cabeza y que quiero escuchar cuando acaba Shining on Everyone, la pop perfection, la sucesión de clásico tras clásico. Al final el duelo guitarras-metales quiere reconocer que no hay nada más excitante que los Stones con Bobby Keys. Una pasada, otro hit, un prodigio de alegría y diversión.


Parking Lot

¿Cómo describir este milagro? Guitarra desnuda a lo Alex Chilton y desgarro de medio tiempo agridulce para que de pronto,  entre toda la banda en un instante de máximo poderío y te des cuenta de que se han hecho mayores, de que esto suena a niveles de exportación y a caballo ganador si fueran tiempos de rock and roll en la radio.
Armonías byrdmaniacas celestiales, sonando a ascuas de roble templado, estribillo entrecortado y de guitarras épicas y un toque de bombo de Iñigo tras las paradas (parece Jim Keltner) y la vuelta al solitario sonido de la Gibson.
El juego de las intensidades y las guitarras y sus tonos, su adictivo crescendo, todo es demasiado bueno para creer que ha sido grabado aquí.
Una completa epifanía que describe esos momentos tontos de plena felicidad donde se mezcla la observación con las sad songs on the radio y uno de los pilares del Shining , con versos como:

On your summer clothes
Well I liked them so much
I could never get over that
Though it doesn’t matter anymore


Healing Time

Si por cuestión de afinidad o generación, Bruce hubiera actuado en el Último Vals con The Band (soñemos) y contara con aquelos históricos arreglos a los vientos de Allen Toussaint , Healing Time hubiera sido su canción.
Transmite el buenrollismo E-streeter o de los Rumor de Graham Parker pero con un interludio de riff roquero de quitarse el sombrero. Es la soulera del Shining. 
El día que la escuché, lloré para despues sonreír; no pude quitármela de la cabeza en toda la puñetera semana.
Santi Ibarretxe a los arreglos de vientos ha hecho un trabajo sublime y sus second line, esas contramelodías te dejan al final con la boca abierta y con la plena disposición en pulsar el repeat nada más que acaba con un corte de vértigo de una nota suspendida de saxofón.
A veces pienso que aquí cuando se queda solo es donde resucita Clarence Clemons y que es Al Cooper em encargado del órgano B-3. Digna de The River o del Heat Treatment, no hay debate.


Kate

¿La joya de la corona? ¿El punto donde vemos todavía a los Fakeband de Too Late Too Bad decir adios o un hasta luego a un sonido fiel al California Dreaming? Todo eso y mucho más.
Con una estrofa muy del Boss maduro, descriptiva en las escenas, muy de autopista llegamos a unos uhuhuhuhuhuhs de los chicos de poner la carne de gallina, como del Surf´s Up de los Beach Boys y a un toque casi reggae de bajo y batería que me lleva a esas canciones de los Staples en la Stax tipo If you are Ready ( Come Go With Me) y no he tomado estupefacientes. El tratamiento vocal y la sorpresa de esta menina tras su estrofa es antológica.Y su explosión guitarrera final, una caracteristica casi de todas la del Shining, de tiempos en que los discos los machacabas a escuchas y no perdían ni un chispa de su fuego eterno.
Por sólo escucharle a Txomin decir "Oh Kate I love ya" merece ya la pena comprarse este disco como en It makes No Difference sería suficiente para enamorarte oirle a Rick Danko pronunciar con ese dolor caracteristico suyo "It´s a losing Battle"


Get You Back

Un homenaje en toda regla a los años sesenta, a los Kinks del Autumm Almanac, a los Beatles más de tetera, a los Small Faces más Ronnie Lane, al Gabinete de Camino Soria. 
Meláncolía sixties perfumada de fanfarría con vientos Rainy Day Women. Las líneas descendentes del estribillo la delatan. 
Escalofriante en su leitmotiv: te he perdido pero te tendré de vuelta, nunca se pierde la esperanza de que las nubes desaparezcan para que el azul vuelva, no hay mal que cien años dure.
Un primor de canción en la que siempre creí en como quedó, zaspa, grabar un clásico, en primera toma y con el encanto del sonido raído de los metales que saben a añoranza.
La escuché en el estudió y les sorprendió mi reacción casi histérica y emocionada. Get You Back era grande como quedó, como los singles de los Honeybus y así tenía que presentarse al mundo. Esta pieza de orfebreria cierra una cara A de infarto.



Cara B



Someone

Para la cara B se reservan comenzar con la pieza más reflexiva , aquella que da un mayor espacio y ángulo de observación de su crecimiento para después combinar los dos temas con fuerza más rockandroller.
Someone, cuyo poderío melódico hace que encierre en ella un millón de tonadas,es otro de las columnas de un disco que ya se puede calificar de Partenón.
Tras un par de estrofas complejas en su simpleza, el efecto fardo de paja que aumenta rodando al viento, prepara el terreno para el solo espontáneo y para los restos de Pit Idoyaga, de esos como el de Layla, de esos que salen una vez y del que debe estar muy orgulloso porque acabará algún día en el display del Guitar Hero. Eso me dijo su camaradacomo, el bueno de Alfredo Niharra que también está en todo el disco inmenso por el cuerpo que le da a todo y por su segunda voz magistral de terciopelo lennoniano.
Es el tema más largo que nunca nos han presentado pero no llega a los 6 minutos. Una mini sinfonía de notas eléctricas y control de las velocidades, de las vueltas, de las voces, de los uhuhuhuhuhs que irradia una grabación cálida y con mucho cuerpo.Soberbia Someone, además como muchas en Shining, una toma live in the studio, de ahí que este disco se corresponda más con el real sonido en las tablas del grupo.


She Told Me

Rock and roll stoniano, canalla, conciso, de primera, sureño, de ese que hicieron en comandita Bob Dylan y Tom Petty en su gira del 86-87. Sorprende el deje vocal de Txomin Guzmán tan suelto, natural y las guitarras y el hammond echando un polvo rápido de primera. En directo, me temo, lo vamos a pasar demasiado bien con este tema,  el día 21 de febrero, viernes,  en el Teatro Antzokia de Bilbao. Diversión garantizada.


Back on the Road

La Cenicienta porque engaña. Hay que escucharla y admirar su serena belleza, ahí incrustada en medio de un festival, con esa armónica a lo Diamonds By The Yard de Elliott Murphy. Back on the Road se va descubriendo en su discrección como el auténtico bellezón del Shining...al tiempo,  porque a esta canción nunca le va a dar las doce.


En cuanto ha su letra tiene un verso extraordinario y real como la vida misma para aquellos que vamos un poco de ingenuos por la vida:

You’re gonna have to get your hands dirty
If you want to get things done
get yourself together and make it back on the road

Something About You

Vuelta al rock and roll, ahora un poco más glam, más Bolan, con un prodigio de riff-punteo inicial y un estribillo bien hermoso.Te dan unas ganas de bailar tremendas, una necesidad que hace tiempo no sentía y es porque en 2013 no hemos tenido un disco de Chuck Prophet y los Kinks no se reunen de una vez.
Una delicia : Just you and me , just you and me babe! y las guitarras.


The Secret

La apuesta por acabar con unos arreglos diferentes, muy Tomorrow Never Knows para embellecer las estrofas de una balada, por fin una balada de Fakeband! Vamos a pensar en ese tipo de canciones que Gary Louris borda.La estabamos esperando.
Y cito a nuestros héroes porque es difícil describir de otra manera sin que vosotros lo hayaís escuchado todavía pero, insisto, son referencias ya que estamos ante Fakeband, con su discurso propio y singular. Con su secreto. 

We know the secret but we wont tell
and I’m only waiting for the morning
If I could tell you how hard it can be
I’d let all come down from the beginning


Una banda que tenía que nacer para nosotros disfrutarla, una grupo que va a hacer historia con estas once estrellas que estarán brillando en todos y cada uno de nosotros, shining on everyone.




Gracias a Fakeband por este regalo (desde que leí unas liner notes de Elliott Murphy en el Live 69 de La Velvet, siempre había sido soñado con poder estampar unas propias en un disco pero nunca imaginé que en uno tan soberbio como éste) y gracias a Itzi Arroitajauregui por ayudarme con la traducción al inglés de las notas del libreto.


Para el vídeo de Top Of The World, tenemos que esperar hasta el lunes, ya queda poco, también tenemos ya copias del cd, aquellos que estén interesados en su envio, como hicimos con Too Late tu Bad, que lo digan, yo se lo traslado a la banda. Teneís a la derecha la posibilidad de contacto en privado por mi email.

miércoles, 22 de enero de 2014

STRONG FEELINGS-DOUG PAISLEY (NO QUARTER-2014)


DISCO LANDER ENERO 2014


Doug Paisley es un favorito de la Land. Su buried treasure Constant Companion (2010) fue comentado aquí ya que, éste fino songwriter de vena clásica, transmite una paz especial, muy a lo Harvest.

Acaba de sacar este Strong Feelings, avalado por un vídeo previo cortito escalofriante que nos dejó en ascuas porque por ahí y por todo el disco anda el bueno de Garth Hudson a las teclas, el mítico organista y de todo...de The Band, su arquitecto de estructura, su salsa especial, su músico de conservatorio, vamos el que ponía el pentagrama en orden.
Eso ya es meritorio de por si. y dice mucho de su calidad..Traér a la bella arruga a tu grabación le da a todo el sentimiento y un sentido muy especial.
El año pasado me pasó lo mismo en invierno con el adelanto del disco de Ron Sexsmith , su gema Nowhere To Go, no me la podía quitar de la cabeza y en este año 2014 me está pasando lo mismo con esta maravilla.

El toque de piano que introduce y acaba el primer tema , esos segundos de Garth ya son de enmarcar para luego comenzar ese perfecto medio tiempo que es Radio Girl que bien podría estar en el Warner Bros. Album de Arthur Alexander, un meloso risoto de country-soul sublime, silbidos incluidos.Un ejercicio de estilo con soul, una pasada. Vintage Kriss Kristofferson o Gordon Lightfoot. *****

Song My Love Can Sing sigue con la tónica mimosina y el colchón creado por el órgano de Garth y todos los instrumentos tocados con mimo recuerda a esa pom llamada Wildflowers de nuestro rubio de Florida o a la misma Lucinda Williams del Essence, country-rock de toda la vida, de ketama, doble cero, del que se sirve en esta casa. Pero por el mero hecho de escuchar tocar el órgano al viejo maestro le damos *****

La acústica It´s Not Too Late To Say Goodbye, en una onda muy Israel Nash ( me lo he pedido en vinilo, su disco del año pasado junto al de que estoy hablando, back to vinyl) , es lo que te puedes esperar de una sucesión relajada, sin contratiempos y muy bien arreglada,  como si fueran temas del Rainy Day Music de los benditos Jayhawks.

Más baladita en Our Love y ya uno presume que este verano le va a dar muchacancha a este disco en el coche ya que suena tanto a ventanillas bajadas como ahora a calefacción con la lluvia fría de fondo.
Es un básico porque no tiene ninguna pretensión de flashear sino de contar, de manera sencilla, de volver con los tuyos y dejarte de rollos y perdidas de tiempo.*****

La menina es What´s Up it´s Down ( la del vídeo) o Todo lo que sube baja, qué brillante perogrullada pero a veces estás solo y triste y no lo puedes evitar. La gran Mary Margaret O´Hara hace un dueto mortal de bueno como cuando Emmylou se junta con los grandes, qué mujer más soulful...como cuando dice On and on and On ( en el anterior estaba Feist, el pelirrojo gusta a las mejores)
El momento saxofón es de levitar, magnífico.*****

Old Times es una delicatessen más para un collar de ellas. Muy sentida, super bien cantada, melódica, subyugante y confesional y vuelvo a recordar a Arthur Alexander y su disco básico de marras de 1971 y al Neil Young del Silver & Gold, material de *****

Growing Souls sigue acariciando la espalda como un tema del final de los The Band, de los crepusculares y con aromas de San Townes pero con una especie de melotrón curioso y beatleliano.Podría ser del Music From The Big Pink.Preciosérrima *****

To And Fro con guitarras eléctricas más afiladas y ritmo más marcial, es la clásica storytelling song como el Rosemary & The Jack Of Hearts que bien pudiera ser de las Fisherman´s Blues Sessions o de un disco de nuestros Fakeband. A eso se llama clasicismo, en este caso y por la competencia con el resto, una estrella menos ****

Where the Light takes You puede pecar de deja-vú dentro del mismo disco pero es la más himno y entra como la seda como lo que hace nuestro Neal Casal  o ese enfant Ryan Adams cuando está en vena incluso Quique Gonzalez , que seguro estará flipando con este artefacto.*****

Pero a pesar de su dulzura , la temática es dura e incluye la muerte y la ruptura tras el transcurso del tiempo porque el country, es hijo del blues y es fado y aquí se disfruta muriendo y se muere disfrutando.
Como dice una de las canciones, podemos hablar en futuro porque esta gema de disco ha venido para quedarse y para siempre.

“I turned the radio on 25 years ago/ And they were playing your song"

La balada tremenda y breve  Because I Love You ***** junto a Margaret, de nuevo, remata una colección PRECIOSA, no hay otro adjetivo. Si eres lander y te gusta propagar el  gospel de éste portal, hazte con esta maravilla, regálala, sílbala, cántala y riéte del mundo, las prisas y de todas la mierda cincundante. Que te llueve y no tienes paraguas, que te ha chillado el jefe, que el que tienes al lado en el curro o en una ventanilla oficial es un imbécil...piensa...recapacita...en casa me esperan los que importan y el Stronger Feelings y con eso y un bizcocho...


lunes, 20 de enero de 2014

PINOW

VOY EN SEPTIEMBRE DESENCHUFADO MUCHACHOS..MI ARRUGA TAMBIÉN ES BELLA


El 5 de septiembre , viernes,  Sala Shoko en Barcelona
y el 6, sábado, en Madrid , Sala Luz de Gas. 
Se presentará en formato acústico, pero acompañado del imprescindible Rumour Brinsley Schwarz.
Fuente: Rio Rojo vía Ruta 66.


viernes, 17 de enero de 2014

FRANKS WILD YEARS - TOM WAITS (ISLAND -1987)

La borrachera de las entretelas

Me siento en deuda con Franks Wild Years, la Cenicienta de la trilogía Island de Tom Waits. Seguramente estaba entre mis entretelas, de las más sentidas, pero por un motivo o por otro , sin ganas de recuperarlo,  por tratarse de sentimientos duros a flor de piel. Recuerdo perfectamente cuando salió, porque yo ya era fan y había pasado por taquilla por todo su catálogo para la fecha y tenía todos sus discos. Había una tremenda expectación, dos obras maestras seguidas como son Swordfishtrombones y Rain Dogs no eran moco de pavo como para no esperarlo como agua de mayo.

Quizás el que fuera asociado a una obra de teatro y , después, a una película de culto como Léolo ( Cold Cold Ground sonaba en su momento culminante) parecía que le harían una obra menor o por lo menos, no del calibre de las dos anteriores.
El caso es que recuerdo que tardé bastante en comprarlo, que era caro (siempre han sido caros los discos) o es que igual estaba en otras guerras y que también me parecía áspero, pero le llegó su momento porque la verdad es que, era y sigue siendo, un disco sumamente intrigante,  lleno de misterios.

Yo en particular lo asocio al ingreso en urgencias de mi darling companion que acabó en un quirófano. Fue esa noche, cuando salimos del cine de ver Léolo, ella tenía mal cuerpo y la película no le gustó nada, a pesar de que sonara su amado Waits en la B.S.O. Algo le pasaba ya porque cuando andas mal, mosca, nada contribuye a estar receptivo y menos a la sordidez de aquella película canadiense,  quebequiana para ser más exactos.
A la madrugada recibí una llamada al fijo de mi casa ( la de mi madre todavía) con la noticia de que ella estaba en el hospital donde becaba (de investigación) pero no precisamente en el laboratorio de Inmunología sino en los boxes de un quirófano.
Unas nubes negras muy grandes se veían en el horizonte, en la salida de la sala de espera.Lo recuerdo perfectamente, mucha angustia y ver una cara que quieres con locura desencajada por el dolor, es algo difícil de soportar.
Durante la intervención y espera (calificación: grave) sonó este disco en mi cabeza y pasó el largometraje en mis pensamientos para que todo, al final, saliera la mar de bien. Siempre pienso que fue un milagro de David Hidalgo y su acordeón en Cold Cold Ground a la que le pedí misericordia por el walkman. Directamente, asocié mi esperanza a Hidalgo , a su memorable intervención en el tema central del tercero de la trilogía en Island Records del del Pomona, el tremendo  y descarnado Franks Wild Tears.
Es lo que me sigue transmitiendo su escucha, esperanza dentro de la complicación y el desasosiego más brutal, una sonrisa dentro de ese sórdido circo que es la vida y sus cambios bruscos que aprietan pero nunca ahogan, por lo menos, hasta que dejas de respirar.

Leólo, el niño, vivía su infierno mediante la evasión en la ensoñación y nunca habrá una mejor metáfora para describir el efecto placebo que nos suministran  nuestras canciones y artistas favoritos.Eres inocente cuando sueñas y cuando escuchas la música que amas.
Rescaté el disco tras el suceso y Franks Wild Years ya sonaba muy diferente, a milagro.
Seamos sinceros, no es un disco fácil porque hay que luchar para defenderlo contra aquellos que se quedaron con el Waits barfly piano man de la Asylum pero aborrecen el cambio que supuso para él encontrar a su Katheleen y que le diera una vuelta de tuerca a su sonido y nunca mejor dicho, lo deconstruyera.
Es como cuando me preguntan si prefiero al Neil Young acústico o eléctrico, paso palabra, me parece absurdo eso de separar por mitades un todo, eso es no querer rendirse a la evidencia de que tenemos polo positivo/polo negativo y en la alternancia está la vida.
Tom Waits con Swordfishtrombones se reinventó a si mismo y creó algo nuevo bajo el sol, eso si, basándose en muchas cosas llenas de óxido por aquel entonces pero preciosas y que nos resultaban novedosas desde el Capitán Beefheart hasta Edith Piaff, también Leólo era una película diferente.
Pero y digo yo...¿para qué elegir algo si no se sabe lo que nos va a tocar soportar en el futuro? ¿para qué encasillarnos si somos cada minuto una emoción diferente que reacciona distinto al sonido de una canción?

Al turrón. El disco comienza con la síncopa de Hang on St. Christopher donde se engrasa la cacharrería con varios de los escuderos básicos de su Island Period: las guitarras cubistas de Marc Ribot (un genio), el bajo de Greg Cohen y la batería de Michael Blair: una auténtica cadena de montaje del horror y uno se acuerda de lo que pasa en Gamonal, sale tu parte violenta porque no hay otra alternativa cuando dejas a un barrio abandonado a la mano del viento. Si se hubieran dispersado, no se hubieran parado las obras. Pues dale que te pego con esta banda gloriosa que con la ayuda de luminarias al saxo como Ralph Carney y por supuesto, al llanto único de la acordeón de David Hidalgo de Los Lobos, entre otros, hacen de todo una barricada incendiaria donde gritar de desesperación.

Straight to the Top en su versión de-mente y rumbera ( la de-frese y Sinatrera vendrá después) es el baile de burdel del infierno, puro vudú y el demonio si existe y es la voz de nuestro hombre con sonido a cinco paquetes diarios de Habanos y un millón de resacas.

La desemperanza se llama Blow Wind Blow, justo lo que quería yo en aquellas escaleras de salida de urgencias, con lágrimas en los ojos, que el viento soplara y despejará aquellas nubes negras, incluso creo que soplé, no llegó a llover. A veces las cosas van mal y Tom domina , como nadie, el tema de aquellos personajes a los que no les protege nada ni nadie.Una marcha fúnebre donde los enanos llevan a Blancanieves a pillar un gramo que la resucite, fabulosa.

Temptation,  es el sonido de los gitanos de la cabra y la trompeta de la esquina de Gamonal norte ( ¿hace cuanto tiempo que no se escuchan en las calles?) comandados por Caruso y el James Brown de los años cincuenta. Una legión de desamparados atrapados por la última tentación de la vida callejera, por ejemplo, las máquinas tragaperras. Hilarante , llena de groove y básica en la transición a terrenos de melodrama Moulin Rouge, manteles de cuadros rojos, tarantelas compuestas para el Cristo de la Compasión de una capilla napolitana.

Porque eres inocente cuando sueñas, claro que lo eres, la culpa no conoce ese arte inmenso que es lo que desarrolló en esta trilogía el loco del tio Tom. Esa canción de chiquiteros borrachos que es Innocent when You Dream en su barroom version se ha convertido por derecho propio en un momento culminante de sus conciertos. La única vez que le vi y seguramente le veré (precios desorbitados), nos la cantó al final del primer set de piano solo y recuerdo que la lágrima me humedeció el papo y cayó directa desde su curvatura a la moqueta.

Seguimos con temas de corsarios adictos al Cointreau:: I´ll Be Gone , con gallo mañanero incluido , recuerda a esa frase mítica de Waits cuando le hablaban de Sad Eyed Lady of the Lowlands, una favorita para él: cuando la escuchas quieres casarte con una gitana y salir en un carromato de por vida pero no hacer nunca nada igual todos los días.

El aire fronterizo y axfisiante de Yesterday is Here relaja un poco el tono por su amplio paisaje Morricone y un registro vocal sujeto por fin al influjo del tranquimazin, precioso efecto ahí incrustada en medio de tanta chaladura.

Please Wake Me Up comienza como una llamada a recuento de frenopático, con sonido a columpio descacharrado para que en una mezcla de talking blues a lo vieja gloria desfasada de Broadway nos relate otra de sus historias de perdedores y perdidos.Estamos en el circo, no lo ovidemos. Waits es circo.

Franks Theme es el primer himno de gospel etílico dentro de una colección que suena a las diferentes partes de una borrachera lúcida donde se caza ante al mentiroso que al cojo porque todo suena impregnadito de ese tipo de euforia que producen los tragos aplicada a realidades como puños.

El barquillero de la margen derecha del Sena parece querer cantar More than Rain mientras de la grandiosa Way Down in the Hole se ocupa el fantasma de Chester Burnett aka Howlin´ Wolf convertido en el Jorobado de Notre Dame. Estos personajes se nos aparecen entre la niebla con un riff monkiano de Ribot que asusta de lo bueno que es, preciso como una integral matemática.Un alarido primitivo recorre todos los surcos de esta segunda cara, a Waits le encanta el disco de la Plastic Ono Band.

Como un crooner vacilón retirado en Las Vegas, rememorando la plenitud de sus Asylum Years , le tenemos a Tom de vuelta a casa en la preciosa versión Sinatra de Straight to the Top (Vegas) Un respiro.

I´ll take New York es un poco Jo qué Noche ,una locura, te has metido en el sitio equivocado y no puedes salir como si tienes que llamar desde Estambul (Telephone Call From Istambul ) porque te has metido en un buen lío. Banjos leprosos tosen por doquier mientras trata de repicar las campanas por los desgarramantas aunque el campanario está lleno de palomas que no las dejan sonar.

Llega el momento para la menina del FWY: Cold Cold Ground, una de sus mejores canciones de la trilogía y la más estructurada dentro del caos que es aquí todo. Sublime aparición de David Hidalgo que llena de ternura un destino fatal.
No seas una llorona cuando hay leña en el cobertizo proclama Waits, utilizando unas frases muy dylanianas época Basement Tapes-John Wesley Harding, todas muy evocadoras, las cosas adquieren vida y las personas permanece inertes. The old weird America.

Train Song es el segundo gospel aunque todos lo son, gospel de taberna pero no sólo eso: en mi opinión es la canción más bella que jamás ha compuesto su autor: más que nada por una razón, por cómo la canta. Si hubiera Oscars para la interpretación de una canción se lo hubiera llevado de calle. Cada vez que la escucho, siento un escalofrío recorrerme por todo el cuerpo que me recuerda que lo podemos perder todo en un segundo y que en Train Song se condensa esa esperanza de que no ocurra, los milagros existen y , a veces, el tren te puede llevar de nuevo a casa porque sucede lo que deseas y sólo por esa posibilidad merece la pena aguantar, como pasó ese día en el Hospital de Cruces, Barakaldo, Bizkaia.

He encontrado un texto de hace muchos años manuscrito que le dedique a este disco entre viejos recuerdos:

Como un zumbido de abeja que viene y va, recordándonos que existen estaciones de trenes solitarias, tipos con suerte, suerte sin dueños, corazones rotos por las más diversas razones, ciudades superpobladas, pueblos abandonados, desiertos de vida, lugares indecentes, personas desnudas, almas desgastadas, coches con zapatos de tacón cubano, camisas años veinte deslucidas por las calles de Tánger, sombreros con la media luna en Noruega, bandas que tocan polkas en Harlem, parejas rotas por sueños violentos, centros siquiátricos y chevrolets descapotables, palabras a destiempo y hasta lapsos de felicidad, despedidas definitivas, tuberías rotas y trenes sin destino. 


domingo, 12 de enero de 2014

LA MISA DE DOCE: BLAME IT ON THE AMP


Los momentos llegan a su debido momento, valga la redundancia. No es exactamente que no tenga tiempo para la Land pero me ha dado por disfrutar de la música en soledad y ando en fase de recuperación de afectos reales y pasiones antiguas cayendo de nuevo víctima de la dispersión, algo exiliado.
Pero quiero compartir con vosotros la música que en los 40 minutos diarios de elíptica y en esos ratos nocturnos después de una cena frugal rematada por un yogur desnatado de Kiwi , llena ese vacio-sacrificio y compensa con todas sus calorías una cierta desgana.

Colgado estoy de Hiss Golden Messenger. Tarde, lo sé Jesús, no me riñas (yo lo apunté bien de tu mágica columna derecha pero lo escuché como no se debe, con prisas, en el primer momento que lo trajo el viento del Cierzo pero sabía que era algo que venía para quedarse, no otra cosa más y a lo que le llegaría el momento)
Estas navidades ha llegado y ando impregnadito de su country soul etéreo pero muy calórico por el número de componentes que veo en su receta, todos en capa y por esa voz magistral del bueno de MC Taylor, pantanosa pero a la vez dulce, menuda clase que tiene el tipo y su compinche.
Su Poor Boy y el Haw,  a los que trato ahora como si fueran un doble por haberlos comprado a la vez, se me hacen imprescindibles a todas horas. Dos bellezones de american beauty.Muy especial su sonido, no cansa.

También le atizo con fuerza y me entreno con el soul descarnado y crudo de Charles Bradley y su inmenso Victim of Love y con Gregory Porter y su Liquid Spirit ( la nueva versión de Hathaway pero con unos músicos , un sonido y unas canciones de quitar hipos, Blue Note Records, you know what I mean)

Hago sesiones en el aparato de marras a mi bola y por lo general con el shuffle on, ajeno a todo el ruido del gimnasio municipal y a los chascarrillos de su increible vida social pero el otro día , me recorrí de cabo a rabo el Tango In The Night, es decir, 7 kilometros y no veas qué gozada ochentera fue aquello, volaba. Los Fleetwood Mac se adaptan a las décadas de una manera que me alucina. Brillantes.

Sigo con el Shining on Everyone de los Fakeband (de privilegiado total,  por tener copia del master desde hace bastante tiempo) porque es ese disco de una vida, ese sueño que se hace realidad y en el que has estado implicado por razones amorosas, nunca mejor dicho, hablando con la banda , intercambiando ilusiones  y entusiasmos. Son los niños de mis ojos. Señoras/es: estamos ante un cosa seria y espectacular: la llegada de su segundo disco, brillando en cada uno.

Por esa misma razón que pronto todos podrán conocer, estoy en fase beatlemaniaca total, con todos los vinilos de los Fab (edición de los setenta)
Cómo suenan los condenados. Capitulo aparte merecen las líneas de bajo de Macca y su relación con las de James Jamerson de la Motown, sin ellas no habría vida en el planeta, son la espina vertebral de la grandeza del catálogo sagrado de los Fab Four, sí,  los más grandes.

Disfrutando de nuevo de todo esto debido a un amplificador hi-fi alta gama espectacular que me ha regalado un gran amigo por el que todo parece filtrarse como recien grabado, fresco como una lechuga de Frías con gotas de rocio; nada perturba lo grabado en el estudio, no hay posibilidad de control de graves y agudos porque no es necesario, suena todo perfecto y le ha dado a mis dos cajas de suelo el amor que necesitaban tras demasiados años de Yamaha serie oferta Corte Inglés. La alta fidelidad combinada con la passion is no ordinary word da como resultado una plena felicidad. Digo esto porque , a veces, la hi-fi si no tiene contenidos , uso y escalofríos generados, no es para nada interesante.Millones de gracias Nacho, disfruto y disfrutaré de él como un enano gracias a ti.  Estoy deseando ese rato del día en soledad para darle al on, se encienda su luz azul y meterle caña para escuchar el elixir , como si fuera nuevo,  de todas mis baldas.

Por ejemplo, un cocktel realizado a base del Lovesick Blues de Chris Stamey con el Love Undercover de James Skelly & The Intender ( Chals, gracias!) puede ser, a traves de ese Electrocompaniet, mortífero de placer. Otros dos discos y otros dos cuelgues considerables. El Love Undercover es el gemelo del Stay True de Danny y los Champions of the World, ese tipo de canciones seguidas homenaje que te devuelven la sonrisa a la boca. Y Stamey, madre mía que bonito, ha hecho un trabajo digno de cualquiera de los dos genios de los Go-Betweens.


El viernes noche sentí orgullo botxero porque el homenaje a Lou Reed del ciclo Izar & Star fue una perfect night, todo redondo, todo conforme a la categoría de un personaje del que duele su pérdida. Pero aquello fue una celebración de vida y rock and roll de una villa que siempre ha sido muy de Lou y un repaso por las bandas participantes de su cancionero soberbio que unido al ambiente de música total me recordó en urbano y comprimido a lo vivido en verano en Frías con el IV Rust Fest. En la pinchada posterior de, nada más ni nada menos,  el triunvirato formado por Ignacio Juliá , Edu Ranedo e Iñaki Hanky Panky parecía que el ambiente de 1977 y NYC se podían respirar y te podías encontrar con Patti Smith o Jim Carroll tomando una cerveza por allí.
Maravilloso ambiente y maravillosa música en el estéreo.

De hecho,  cumplimos otro sueño, que es el de conocer en persona y pasarlo muy bien con Ignacio Juliá que fue como, por fin, encontrarte cara a cara con un profesor de la Universidad a distancia (Ruta 66) al que siempre has leido para darte cuenta que es tan sólo un fan como tú, adicto a la pasión pero con un gran talento para sacarla al exterior y transmitirla, un grande o mejor dicho, el grande. Tendríais que verle su baile sincopado mientras pinchaba delicateseen Velvet exclusiva ( como el primer Heroin grabado antes de formarse la Velvet) como si lo estuviera escuchando por primera vez.
Tatareamos Point Blank, hablamos de Zevon, de Nightlights versus Just a Story from America y me dijo que Wilco era el grupo más interesante del momento, en su opinión, recomendándole yo que echara un tiento a The National por su amor a Joy Division ya que, sorprendentemente , nunca se había parado en  escuchar a los fadistas de Brooklyn.
Nos dijo algo a mi y mi cuñado, en la soledad de los pasillos de las salidas de emergencia, realmente hermoso: el escritor, de rock o de lo que sea, siempre cree por sistema que no le lee nadie, por lo que agradece infinito que haya alguien que le diga que sus palabras , todas juntas, fueron leídas y aplicadas en su vida. The loner, como la firma que estampó en mi copía del En el Ojo del Huracán, su fabuloso libro sobre Neil editado en los noventa. y el único en castellano que merece la pena.
El periodismo musical se está muriendo, la old school la disfrutamos los viejunos y la añoramos, el proceso era más lento, ahora las cosas tardan en nacer lo mismo que en morir, en palabras de Antonio Vega, otro de los fetiches de Juliá, lo que una décima de segundo.
Pues nada que os dejo de dar la brasa de una vez y que suenen las canciones de la misa de doce.
Buen domingo para todos.







domingo, 5 de enero de 2014

HAPPY THREE KINGS


Uno de esos momentos de la Historía donde todo merece la pena. Sisters and Brothers que los Reyes os traigan soul a montañas.

jueves, 2 de enero de 2014

DON´T FALL APART ON 2014


FELIZ AÑO 2014, que suene todo así de bien y que nos lo pasemos como se lo pasan Sly & Robbie, Mick, Mark y el propio Bob en esto vídeo mimosín donde los haya. Qué temazo es , además!

No more booby traps and bombs
No more decadence and charm
No more affection that’s misplaced, girl
No more mudcake creatures lying in your arms

I neeeed you, I neeed you!

Amo la música más que a todo.

Amo la música más que a todo.
Todos los textos pertenecen a Joserra Rodrigo salvo citas y párrafos con su autor referenciado.