jueves, 3 de noviembre de 2011

NOT EVERY BLOG TELLS A STORY

Trate durante muchos días de corresponder con una entrada a ésta pero no pude, me emocionó hasta lo más profundo de mi osamenta, creo que es muy fácil hablar de música pero muy difícil ser transparente. Es decir, contar que Every picture tell a story es uno de los mejores discos de los setenta , que si Ron Wood , que si bla, bla, bla pero hay pocos que tengan los cojones de ser transparentes y contar su propia historia, pocos y uno de ellos el His Aitorness, se llama Aitor y se apellida Díaz Paredes, es navarro y no se oculta en nick, bueno Fuckin´ Perry es parte del atrezzo.
Pensadlo pero eso dice mucho de la persona y de su generosidad porque yo de muchos ni conozco el nombre si no fuera porque me intereso.
Dicho esto, estoy tan super indignado con el cierre del blog de Aitor que me dan unas tremendas ganas de chapar éste: es una mierda exponerte porque hay gente muy hija de puta, muy cotilla, muy voyeur chunga pero sinceramente, fuck them. Yo he conocido gracias a esto a amigos. Sin ir más lejos , Tomi que nunca comenta, de Pucela, le envié dos copias de Fakeband ( tengo todavía animaos, es el disco del año, de nuestro año y nuestra amistad) y me ha dicho que tengo la habitación de invitados dispuesta si me voy a conocer Valladolid (tengo muchas ganas pues siempre he estado de paso)
A lo que iba, Every Picture Tells a Story es de esos discos midseventies inexplicable con coordenadas wikipedicas, es algo que te deja en pelotas, como bien lo describió Aitor.
No se podía haber contado el feeling que te produce mejor. Te invita a cenar pero no te mete un billete en el sujetador, eso es Every Picture , eso es Megamelómanos.
En lo de los bloggers es como en los músicos hay muchos que entretienen, que están francamente bien, que maquetan y arreglan, que hacen buenos discos de estudio y luego está el raw power, los que no se editan: Jeff Buckley , Amy, Mark Everett o Bob. Sin ellos,  todo es más difícil, hace falta artistas y sin Megamelómanos, yo paso. Sólo falta que me jodan el Time is on My Side y El hombreamadecasa, entonces apaga y vámonos.



Una de las entradas más míticas, period. Megamelómanos ya!
Blogger responde cobarde! ¿Serán las revistas de música las denunciantes de lo malas que son?


Aquí está la entrada, cortesía de Aitor.

"EVERY PICTURE TELLS A STORY"

"I've never been more in love with anyone nearly half my age than I am today. I'd get married in a minute if I weren't still married to somebody else" - Rod Stewart. Le queremos, es inevitable.

Lo sé, ahora mismo estáis sextasiados por tener en vuestras manos un post del inimitable, el grande, el cachondo, el incofundible Rod the Mod. El mes pasado fue mi cumpleaños. Tranquilos, no os voy a dar el coñazo con eso. Os voy a dar el coñazo con otra cosa. Pero luego pasamos a Rod y nos descojonamos. De hecho le debo bastante a Rod porque de no ser por él, por acordarme de él, habría terminado bastante deprimido. Ya sabéis que yo no puedo con los cumpleaños y me siento terriblemente incómodo. Me siento como... como Vince Neil conduciendo un Seat, como Sebastian Bach bebiendo un Bitter Kas, como Matt Sorum al ver una cana, como Bon Jovi notando una arruga, como yo mismo si no puedo hacer un comentario ingenioso sobre Vince Neil o Sebastian Bach o Matt Sorum o Bon Jovi. Lo dicho, incómodo. Como ahora mismo mientras miro a Rod siendo tan sexy. He estado algo nostálgico estos días. No, tranquilos, no es deprimente. Sencillamente mis amistades de mi promoción original en Comunicación, al menos la mayoría, ya han acabado la carrera. Les quedan exámenes pero el caso es que ya no nos volveremos a vernos por la universidad o por Pamplona salvo alguna ocasión muy excepcional. Los hay que no son de aquí y como es lógico se irán, y supongo que los de aquí también. De hecho lo deseo por ellos porque Navarra es una provincia bastante aburrida... y deprimente. Pues bien, me dio por cotillear fotos viejas por esas redes sociales en las que está todo el mundo de mi edad. Bueno, y de la vuestra. No voy a decir cuál. Soy un tipo discreto. Antes de empezar: esto va de mujeres. Lo aclaro por si alguien, al ver que el protagonista de hoy es Rod Stewart, ha pensado que esto iba de tintes de pelo. No soy ningún maestro con ellas. Cuando empecé Historia dos chicas de clase me comentaron que a ver qué hacía con guantes de cuero a principios de octubre, que todavía no hacía frío. Entonces les comenté que los llevaba siempre para no dejar huellas en mis crímenes. Me resultó ingenioso.

Ellas me miraron con horror. Patidifusas, ésa es la palabra. Reculé y les comenté sonriente que no, que en realidad eran de ir siempre en Harley. Me miraron con estupefacción. En mi mente resulté tan molón que pensé que las pobres no habían escuchado mi ingenioso y, rayos, sexy comentario, así que se lo repetí de nuevo para que quedase bien claro. Al ver que su expresión de estar a punto de llamar a los bedeles para que me acompañasen a la salida no cambiaba me di cuenta de que en realidad sí que habían escuchado lo que había dicho. Sí, así soy yo. Pues bien, estaba mirando fotos viejas. No mías, claro. De otra persona. Conocida de vista. Ni siquiera la tengo agregada. Pero tenemos conocidos comunes. Antes de que digáis nada, sí, ya sé que estoy sonando como un psicópata. Ahora voy a pasar a parecerlo directamente. Dejad que me ponga demagógico por un momento. Todos lo habéis hecho. Sin ir más lejos, cuando me dijeron con quién estaba en el grupo de Arte Clásico en 1º de Historia, al no conocer a nadie, en efecto tuve que hacer de Dexter Morgan. Cambiad una base de datos de criminales por cierta red social y ya está. Ahí estaba yo con la lista de nombres buscando por Facebook y Tuenti a ver quién era quién en un acto realmente deprimente. Aquí pasó algo más o menos parecido. Este contacto común básicamente no me importa en absoluto, pero estaba aburrido en ese típico momento de después de comer en el que si te pones a estudiar es probable que sufras un ataque de narcolepsia de tamaño Tales from Topografic Oceans y me puse a cotillear sus fotos. Por otra parte es esa persona la que permite que cualquier colgado como servidor vea sus fotos, así que tampoco es que me sienta culpable. Y ojeando y pasando páginas tan rápidamente y con tan poco interés como Elton John mirando un catálogo de Victoria's Secret, mientras veía fotos de personas que, en efecto, hace un par de años iban conmigo a clase, pero que ya ni recordaba, llegué a unas fotos en las que, sí, salía "ella".

Dios, qué mal rato. Se la tragó la tierra. Desapareció al terminar aquel curso y no volví a saber de ella. Es decir, compartimos clase durante dos años. Sobra decir que no tuve cojones para hablar con ella en ningún momento. No podía. Era realmente lamentable. Estar delante de ella y no poder hablar. Cerrarse la garganta. Penoso. En efecto supongo que pensaba que yo era una especie de pervertido así que por suerte ella tampoco habló conmigo. Chicas, un consejo marca Megamelómanos: nunca, jamás, bajo ningún concepto, si hay un chico que os idolatra pero con el que sabéis que bajo ningún concepto pasará nada, le deis cancha. Ignoradle. La compasión es lo más cruel que puede haber porque lo único que conseguirás será que el infeliz de turno se haga falsas esperanzas y, peor, se enamore más de ti. Bien, dado el consejo de hoy, sigo. Me di cuenta de su existencia un par de meses después de empezar la carrera. En mi defensa he de decir que la promoción era de unas doscientas personas, el aula parecía un jodido parlamento y yo ya veía fatal de lejos. Hubo antes una chica que me gustaba y lo intenté pero aquello digamos que... bueno, no salió, por suerte. Para los dos. No sé en qué estaba pensando. Total, que ese día por pura casualidad nos sentamos al otro extremo del aula, justo detrás de ella. No daba crédito. La chica más guapa que había visto en mi vida. Recuerdo qué clase era y qué estábamos viendo en ese momento y hace ya tres años y medio. Siento decepcionarnos pero no era rubia. Lo sé, mi reputación ha caído bajo mínimos y la mitología creada por este blog se va por el desagüe. Apenas se lo comenté a mis amigos, los cuales me decían que tampoco era para tanto y que tenía novio, pero supongo que terminó sabiéndolo. Lo cual hacía todo esto más deprimente si cabe. Si había un examen, cuando ella se levantaba para entregarlo me quedaba mirándola. Hacía ese tipo de cosas. Eso en mí es muchísimo. Alguna vez toda esta historia no me dejaba dormir bien. Pero pensaba que ya lo había olvidado y que había pasado mucho tiempo.
¡Rod X-tewart al rescate!
Oh, gracias, Rod. Rod os la describiría físicamente y todas esas mierdas, pero como es obvio no pienso hacerlo. En mi opinión era perfecta tal y como era. Además, me gustaba cómo vestía. Y tenía personalidad, o al menos daba esa impresión. Igual es lo que pasa cuando idealizas a alguien. Como este curso he tenido prácticamente todas las asignaturas en mi vieja facultad, pasaba casi todos los días por esa especie de corredor que hay hacia la entrada. Recuerdo que era especialmente incómodo cuando llegaba yo por la mañana, prontísimo -Sí, soy ese tipo de persona que llega veinte minutos antes a los sitios-, y estaba ella en la puerta. Es un camino recto entre la cristalera del edificio y el césped bastante largo. Ella estaba al fondo, yo la veía desde que doblaba la esquina, y entonces se producía el colonoscópico momento en el que yo iba hacia la puerta mientras pensaba qué cojones se suponía que tenía que hacer: si saludar, no saludar, dejar de moverme como Mick Jagger enfarlopado en una fiesta con Tina Turner, mirar para otro lado, ponerme el MP3 para hacer ver que iba en mi mundo... cuando decidía algo ya estaba llegando a ella. Las chicas notáis eso a millas, así que imaginad lo que estaría pensando mientras veía a un tipo despeinado y con un abrigo enorme cambiando de paso cada cinco metros. Con los guantes. En abril. Pero terminamos el segundo año y desapareció. No volví a verla. Y de repente me encuentro un montón de fotos en las que aparece. Es que estaba muy guapa. Mierda. Este post iba a ser gracioso. Os he timado. El único motivo por el que recordé a Rod fue que una frase vino a mi cabeza en ese momento y me estuvo persiguiendo todo el día. "Every picture tells a story". Las fotos viejas me matan y verla hace más de dos años me provocó un flashback acojonante que me enfadó bastante por haber sido lo suficientemente consciente de mi inutilidad como para al menos no intentarlo y hacer un poco el ridículo. Básicamente porque tengo en tan baja estima a la mayoría de hombres que apuesto lo que sea a que yo lo habría hecho mejor.

La idea era hablar del glorioso Tonight I'm Yours -Sólo por el videoclip de la canción homónima daba para tirarnos por el suelo- como cumbre del rock cachondo cock rocker de nuestro querido Rod, pero ya caerá cuando me pase alguna situación absurda y divertida. Hoy os juro que no me sale hacer un post cachondo, ni polémico, ni un post trabajado y biográfico sobre algún disco clásico. Bastante tengo con asimilar que una persona a la que en realidad no has conocido nunca y que probablemente no vuelvas a ver te puede "perturbar" así y hacerte sentir tan mal. No es que no sienta el menor respeto por la gente, pero casi todo el mundo me importa más bien poco, y ahora, después de todo este tiempo, se podría decir que me preocupa un poco pensar en si le irán bien las cosas y habrá conseguido lo que ella quisiese. No pude evitar cotillear para ver si seguía viva, pero no encontré nada... y no quiero parecer un jodido acosador. Pero si la relacioné inconscientemente con el Every Picture Tells A Story tenía que ser por algo. Pero no tengo ni idea de cómo lo hice, la verdad. Me pareció que el título del disco encajaba con las fotos. Fotos que por otra parte tampoco voy a comentar, así que os quedáis con las ganas. Os juro que existió, no invento nada. Parte del problema es que le sigo teniendo tanto respeto que si hacemos como que lo que he escrito no ha existido, mejor. Aunque no tengáis ni idea de quién es. Vaya este post para todos vuestros amores platónicos, que desaparecieron y de los que no volvisteis a saber. Quién sabe, lo mismo un día os la encontráis en el autobús. Y le vomitáis encima o el conductor de un frenazo y salís volando. En 1971 Rod todavía no era el inconmensurable putero pichabrava, pero apuntaba maneras. Y sacó el que fue su mejor disco. Os juro que, más allá de todos los vaciles que ha protagonizado este señor en el blog, su carrera en los 70', tanto con los Faces como en solitario, es enorme. Y si os digo que éste es el mejor, eso significa mucho.

Y vale, cuando Rod dice con su voz quebradiza eso de "The slit eyed lady knocked me off my feet God I was glad I found her and if they had the words I could tell to you to help you on the way down the road I couldn't quote you no Dickens, Shelley or Keats 'cause it's all been said before Make the best out of the bad just laugh it off You didn't have to come here anyway, So remember, every picture tells a story"... no sé cómo encajó tan aterradoramente bien pero ahora leo la letra mientras escribo esto y la verdad es que ella encaja en la canción... ¡Que tenía los ojos un poco pequeños! ¿Qué mierda de defecto es ése? Tenían una profundidad acojonante, cabrones. Pero creo en las casualidades, así que lo que me cuenta Rod tampoco cambia gran cosa. El caso es que Every Picture Tells a Story es una canción preciosa y la prueba de que haga lo que haga Rod Stewart, ya sea cantando baladas para señoras o recordando viejos tiempos con Jeff Beck, siempre será uno de los mejores cantantes de la historia del rock. Es un disco muy baby, baby, baby, pero sin cock rock, te invita a cenar, no te mete un billete en el sujetador. En el fondo me alegra que gracias a ella haya vuelto a escucharlo. Junto a sus compadres de los Faces, amén de un grande como Ian McLagan, aquí Rod se ganó el cielo grabando un disco prácticamente acústico en el que el mejor instrumento es su voz apoyada en las breves y exquisitas descargas eléctricas de Ronnie Wood, caso de ese sublime solo en Seems Like a Long Time enmarcado entre los coros de Madeline Bell y esa voz que tiene este señor. Bueno, y el piano de Pete Sears. Todo el mundo conoce Maggie May, una de las grandes canciones, no de Rod sino de la historia del rock, pero el repertorio es abrumador. Las versiones que adapta Rod son perfectas -En especial la rockera (I Know) I'm Losing You y dos de las cosas más maravillosas que he escuchado nunca: Reason to Believe de Tim Hardin y Tomorrow Is a Long Time de Dylan-, y su Mandolin Wind... y uno se acuerda de ella. En el fondo echo un poco de menos pasarme el día intentando evitarla.







No puedo más que llorar. Yo tuve un amor más bien platónico al que le gustaba este disco y Madman across The Water de Elton, era bastante más mayor que yo, yo era un adolescente, en fin, me llegó tanto la historia...toda las canciones cuentan una historia y algunos, pocos blogs también.




10 comentarios:

  1. No me creo que vivamos en una sociedad que produce una vida tan mediocre.
    Tan pateticos son que todo lo que les incomoda o asusta o molesta prefieren cerrarlo antes que tratar de comprenderlo o rebatirlo. Asi nos va.
    Un abrazo a Aitor y que tire para adelante. Nos tiene patra lo que necesite.

    ResponderEliminar
  2. Es que....si es que....este niño no tiene desperdicio!!yo ya le he pedido que se case conmigo varias veces y nada....que no hay forma de llevarle al huerto! en fin, vaya sentimiento y vaya forma de escribir. Queremos que vuelva y queremos conservar su repertorio para poder echar mano cuando lo necesitemos! Mentor, es muy bonito y emotivo lo que estás haciendo por nuestro Aitor, un beso muy fuerte a ambos!!

    ResponderEliminar
  3. Joder, chapar un blog como Megamelómanos es, sencillamente, un crimen. Para mí lo que hay detrás es bastante envidia y mucha mediocridad.
    Este post se me había pasado por alto en su día, por lo que no pude comentar. Me tomaré la libertad de hacerlo aquí:

    Aitor, a veces no sé si creer que tus historias son reales, muchas cosas de las que cuentas aquí me resultan muy familiares y dolorosas, pero no se cómo te lo montas para que te salga tan natural y auténtico, y además tan brillante e ingenioso... Yo sería incapaz de abrirme así, y mucho menos de hacerlo con tantísima clase. En fin, cada entrada tuya es un mundo... En cuanto al bueno de Rod, siempre lo he admirado y me ha caído de pura madre, y sin embargo apenas conozco su carrera. Este disco, para inspirarte a escribir como lo has hecho, debe de ser muy muy grande, tanto como tu blog, así que ahora voy directo por Rod The Mod y por el Every Picture Tells A Story, y sé que siempre que lo escuché me acordaré de esta entrada y de tu gran blog.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  4. Ya he colocado a Bob en la barra lateral y ahí se quedará hasta que devuelvan Megamelómanos.

    ResponderEliminar
  5. Aitor es genial, textos con chispa y que transmiten. Espero que esta injusticia se arrgle, yo de momento voy arreglándome el wordpress, y si se da el caso, pues se da el salto que al final lo que importa es la conexión entre blogs y la música, blogger es solo un vehículo como pueda ser otro, un vehículo un tanto fascista por cierto. Excelente entrada para todos los amores platónicos. Inmejorable banda sonora.
    Si hace falta algo Aitor ya sabes, lo que haga falta.
    Saludos joserra

    ResponderEliminar
  6. Lo de megamelómanos es de traca!!! Qué coño pasa?

    Y lo de Rod también lo es. Precisamente el otro día le defendía a capa y espada ante mi archienemigo y su secuaz. Este hombre es grandísimo aunque se haya convertido en una vieja permanentada (aunque sigue siendo sexy!!!) Con Jeff Beck, con los Faces!!!!, solito!!!, qué nivel, qué voz, madre mía!!!! Qué ninguneado por las nuevas generaciones y el gafapastismo al uso. Siempre Rod!!!!

    ResponderEliminar
  7. busquen Megamelomanos en Google y apreten en las 2 flechitas de los Costados, ponganlo en modo cache. Y tan tan... Tenemos Megamelómanos!!!!. Esta hasta la entrada de The Strokes. Capaz nos da una pista de cuando fue denunciado.
    SAludos

    ResponderEliminar
  8. Hola, soy nuevo por aquí escribiendo, que no como seguidor. Me sumo a la protesta por el cierre de Megamelómanos y secundo las acciones emprendidas y las que vengan para su devolución.
    Aprovecho para un par de cosas, felicitar por este blog a su autor, espero que siga por mucho tiempo, y pedir un disco de The Fakeband, dime por favor cómo hago el pago y te doy dirección de envío, pero lo necesito ya! Gracias anticipadas y, si pisas Logroño no dejes de reclamarme un par de vinos que te debo desde ya. Saludos.

    ResponderEliminar
  9. Juan, encantado, no tienes más que mandarme un mail a joserrarodri@gmail.com.
    Muchas gracias por aparecer y comenta por favor, todo es empezar. Logroño, qué buena ciudad y Bilbao están muy cerca osea que ya nos conoceremos...UN ABRAZO!

    ResponderEliminar
  10. Uf, este post me deja hecha polvo, Joserra, y mira que ya estaba triste. Donde encontraba historias como ésta, ahora sólo hay un triste pantallazo, que me entran ganas de llorar cuando lo veo. Joder, mira qué post, quien no se emocione leyendo esto es que no se ha enamorado nunca. Que nos devuelvan Megamelómanos, por favor. Rod, haz algo...

    ResponderEliminar

Amo la música más que a todo.

Amo la música más que a todo.
Todos los textos pertenecen a Joserra Rodrigo salvo citas y párrafos con su autor referenciado.