PULL UP SOME DUST AND SIT DOWN - RY COODER

Hard Times ¿come again no more? Yes, come again

Seamos realistas, debatir si el disco de Wilco está bien o mal son tonterias, los de Chicago son ya  nuevos ricos y no nos representan, por lo menos a todos los que estamos jodidos y asustados y estamos tirando de yogures carrefour basic. La cosa está fatal y no tenemos unos Clash para en sentido figurado cagarnos en lo más barrido.

Tiene que ser 2011 el año de la crisis a todos los niveles en el que los viejunos tienen que darnos lecciones y, por ahora Paul Simon y me pega que Lindsey Buckingham ( qué deliciosa y estupenda primera escucha) y ahora, el amigo Ryland sean los encargados de poner las cosas en su sitio.

Ry Cooder ya rescató la depresión de los treinta musicada en lo setentas, esos discos cálidos y bellos como pocos y ahora, lo hace de nuevo pero no con covers sino de su puño y letra, sólo hace falta leer los periódicos (online, of course)
Yo adoro sus últimos discos y , sobre todo, cómo suenan, son tan robustos... Es junto a Los Lobos por lo que iría en peregrinaje musical a L.A. Ry es L.A. como Amália es Lisboa.

Chavez Ravine me flipó pero todos, todos, sus aventuras siempre son tan interesantes, te hacen tanto pensar, leer el libreto, esas fotos vintage, investigar, comprobar que los Hard Times siempre llegan y te pillan y siempre son los mismos culpables y las mismas victimas. Pero él consigue meternos en un Shangri-La de resignación, de hombres pobres y buenos instrumentos sobre palos angelinos que en realidad son los de toda Norteamérica.

Ry Cooder tendría que haber estado en el Ultimo Vals con The Band, con eso digo todo.
El que haya comenzado en Metacritic con la máxima calificación 100, el que tenga una preciosa portada, la reseña five stars del Uncut, del que me fio más porque me descubrieron a Richmond Fontaine que son los Ry de ahora en grupo y demás arrebatos, hicieron que ayer me apresurara a ver si estaba disponible en original en las poquísimas tiendas que quedan ya en Bilbao de discos. Lo encontré y me lo llevé sin haberlo escuchado previamente...eso ya no se puede hacer ni con Wilco...jajaja.
Os cuento: este año hay poca cosa brillante, brillante de diamante y salvo el de Gillian Welch, The Decemberists y Bon Iver, un hijo de la Violeta pero increiblemente bello y diferente al primero y el mágico de Fionn Regan ( reseña en breve, m-á-g-i-c-o) no veo yo mucho que merezca la matricula de honor , ni siquiera el sobresaliente.
Esta delicía SI.
Y Bruce estará muerto de gusto con él porque se muere por Woody Guthrie y esto es lo más parecido a un disco punk en 2011: verdades como puños, historias reales, personas que aman la artesanía y las herramientas.
Se puede considerar un brown album (The Band, el segundo) pero in a Ry Cooder style: su melting pot pero atinadisimo, sin desvaríos, precisa secuenciación, sincero, generoso, amoroso y demoledor.
Los catorce temas discurren como una verbena de pueblo en la que te cabreas con esos sinvergüenzas llamados politicos o banqueros, en la que bailas con tu darling un bello corrido ( ay David Hidalgo I love you) , en la que cantas un himno gospel más negro que el carbón con Terry Evans y Willie Green ( sólo verles en unos créditos se me ponen los pelos como escarpias) y ves la vida pasar con sus cosas buenas y malas.
No se pueden destacar canciones porque esto es un menú completo y sin posibilidad de levantar la aguja, desde la primera a la catorce pero dejadme decir sólo tres cosas: es el mejor disco del año, tiene las canciones más preciosas jamás compuestas por el angelino de la strato escalofriante y Simple Tools, Simple Tools.

Dejémonos por un rato de Wilco, simple tools, verdad, aire para respirar, motivos para seguir indignados, don´t follow the leaders, watch the parkingmeters: en 2011 el parkingmeter tiene nombre y es Pull up some dust and sit down.

Ry Cooder for President ! bailas?