martes, 12 de julio de 2011

MOMENTOS DE FELICIDAD ESTÁTICA

Broadway, Muswell Hill, North London

¿De donde viene eso de ser tan kinky? Mi generación recibe los clichés ingleses de los cuentos y de las películas: Oliver Twist, Chitty Chitty Bang Bang...Eran los eternos re-estrenos de nuestras navidades a los que nos llevaba mamá, la madrina o nuestros hermanos mayores. Estos últimos lo vivieron como algo suyo pero nosotros como un sueño y lo que se observa con ojos amplios y extasiados en la oscuridad, permanece, con su halo en el subconsciente por los siglos de los siglos, en definitiva se keda. Niños con hoyuelos manchados de carbón, callejones sin salida con el viejo que te persigue por haber robado una manzana con pintas de enterrador, humos malolientes y nieblas del Támesis, chimeneas y teteras, ketchup y cuadros escoceses, arriba y abajo (la serie) chimeneas y teteras otra vez, hileras de preciosas casas de ladrillos como los de nuestros Exin-castillos, clase obrera mezclada con dandis, historias de revolución industrial, mundos en blanco y negro con luces ténues vistas desde el aire como Peter Pan...¿Qué tienen todas esas tonterías para ponernos tan amorosos? En mi caso, está el plus de vivir la vida en el british Bilbao...cada vez menos , por desgracia.
De ese escenario que nunca quisiste salir y en el que siempre quieres volver a entrar, no sabes si por un interés real pero si por el estado placentero que te produce...ahí vienen los Kinks, en un momento posterior, para hacer de poción nostálgica con efectos de recuperación de muchos de aquellos valores, de aquella inocencia. Quiero entenderles así, mi relación con ellos es muy visceral. Todo vuelve a ser como la noche de reyes, , mágico, se recupera la inocencia y vuelven las tías de Burgos con sus galletas tostadas de la Flor Burgalesa.
El otro día el Agente Cooper comentó trancribiendo un trocito de la letra de Muswell Hillbillies y dio en el clavo: chicos de barrio fascinados por la mitología country and western y los U.S.A.: ¿No es eso lo que somos y seremos los fanáticos del r&roll?
Sin embargo, los de Muswell Hill, para ser más exactos Fortis Green, lograron el efecto inverso: que las colonias fueras más interesantes que el imperio. Siempre he visto mucho country en su música, la madre del rock and roll pero como fueron producto de su tiempo , de su ciudad y de sus circunstancias hicieron un melting pot perfecto y trascendieron, hicieron de London una ciudad cool siendo unos macarras del área norte pero con sensibilidad, es de esos que te daban una colleja por rockie pero luego te invitaban a un helado. Antes a Londres se iba a hacer negocios, desde ellos a comprar camisas Ben Sherman y discos imposibles de encontrar en otro lugar , hicieron un poco más Roma de esa magnífica ciudad y le dieron sentido a un peregrinaje. Ocean Colour Scene existen por ellos.

Todo esto viene a propósito de Percy, esa banda sonora pérdida en su discografía, que nadie mira, que nadie quiere como a Oliver Twist y que encierra oro kinky aparte de cuatro de las canciones más maravillosas del cancionero de Mr Ray.
El que sean considerados sobrantes, ideas, bocetos siempre ha relegado a Percy a un segundo o tercer plano pero su último disco en el sello Pye es delicioso, una despedida todavía más entrañable que no mejor (imposible) que el Village Green.
Los instrumentales muy rythm and blues ( una especie de ensayos como unos Booker T & The MG´s donde el hammond lo dulcifica todo, aquí en vez de en McLemore Avenue estamos en Broadway Muswell Hill pero el mismo paletismo o garrulismo como dice anónimo e;  los temas de opereta barata con la voz del viejo que te persigue porque has robado la manzana, los country and western, los picnic con los sandwich cuyos poros todos están impregnados de salsa HP y hasta un flamenquito llamado Helga...Todo eso que parece menor está para envolver las cuatro columnas del Percy y para que las admiremos:

God´s children

Un remake de Days, los mismos acordes iniciales pero que no nos despisten, esto es una joya de la corona.

The way love used to be

De mi songbook, mi momento favorito lento del genio Davies porque me encantan los arreglos de cuerda, sean de Buckmaster, de Nelson Riddle, de Jobim o de Kirby. He llegado a perder el sentido con este tema, epifánico, con esos aromas eastern-curry de los que bien tomó nota el bajista de los Zep para el Kashmir.

Moments

Temblorosa declaración de principios y desarrollo armónico marca de la casa, noche de reyes total, un trozo de roscón y mirando por el quicio de la puerta todo lo que se menea por el salón...Tantas tonadas ocultas para soplarles el polvo...momentos de felicidad estática dice la letra, una buena forma de llamar una boxset del grupo más sugerente e inteligente de los sesenta.

Dreams

Siguiendo esquemas de Shangri-La, otra para la banda sonora del sueño Mary Poppins, los clavicordios y las acústicas y luego, el macarreo, el barrio, los paletos, Muswell Hill, como dice el bueno de Aitor, a los feos los Kinks les hace sentir guapos, son un talismán , una contraseña. Les amo.
Y aquí otra idea para otra kamiseta:

When I look so far away
Please don't wake me from my dreams
I'm just wondering who I could be 
If I lived inside my dreams

Raymond Douglas Davies 


Nos lo pueden robar todo, todo menos los sueños kinks:



4 comentarios:

  1. Te hacen sentir más guapo y si vas por Londres con tu camisa sesentera de lino... ocuh... yo quiero ir a Londres, qué envidia me vas a hacer pasar.

    PD: He de confesar que de Sir Ray Davies no paso del 'Schoolboys in Disgrace'.

    PD2: He de añadir que hay otra vía, la de la Reina Victoria y la Compañía de las Indias Orientales. Kula Shaker, St. George mediante, idolatro su primera etapa, flipo con 'Shower Your Love' ahora mismo.

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  2. Bonito artículo Rodri, pero, si sigues tocándonos la fibra en el blog... qué vas a dejar para el libro?, hace muchos años, siendo freaky total de mr. Hornby, que lei 31 Songs, tengo el de Amat para mi cumple en octubre, pero yo lo que quiero leer es algo por el estilo pero del Rodri. No lo dejes tio. Un fuerte abrazo!!

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  3. Joserra cuando escribas el libro ve reservándome al menos tres copias:una para leer y llevar a todas partes sin temor a manosearlo, otra para guardarlo en la estantería y un tercer ejemplar para recortarlo y decorar las carpetas como en el instituto jejeje

    Qué haríamos sin la música...

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  4. Buena cosa Percy, lo buenos de las cosas olvidadas es que el reencuentro es aún mas poderoso. Gracias a Dios pertenecemos a ese sector que cree más allá de lo que suena, que busca y explora porque nuestros corazones lo necesitan para latir. Be mod my friend! besos!

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Amo la música más que a todo.

Amo la música más que a todo.
Todos los textos pertenecen a Joserra Rodrigo salvo citas y párrafos con su autor referenciado.