DURANGO, CALIFORNIA

Quiso ser nuestro Durango del Estado de California durante unos meses en 2001, en que dos picapleitos, amigos , hicieron germinar una semilla enviada en forma de homemade cd y titulado: "The Lovelorn Wolves: The Best of The Jayhawks"

Esa compilación doble lo era de sus discos publicados hasta el momento que ya eran cinco, es decir, Blue Earth/Hollywood/Tomorrow/Sound/Smile.

Me curré para su portada toda la posible memorabilia, ahora ya imperecedera, incluida en los libretillos , en las promos, en las revistas y salió lo que veis ahora escaneado que, por cierto, se publicó en el libro de portadas hechas por freaks titulado Gracias por la Música.

Entre Hechos y Fundamentos de Derecho, entre vistas en Bilbao y consultas sobre propiedad horizontal ese artefacto reventó las paredes del bufete de la antigua Tavira y yo creo que aunque no lo presencié en directo fue el impacto musical por transmisión contagiosa más glorioso que se puede haber provocado.

Si los lazos de amistad suelen ser eternos para nosotros y desde el cole, para bien y para mal, en este caso, con el Lovelorn Wolves yo creo que se consiguió una eterna fidelidad.

Debo confesar que tardé un poco en entrar en el grupo, como me costó , por ejemplo, entrar en el Nebraska pero aquello que se resiste,suele ser, a la larga, lo más duradero, el amor es así.

Cuando escuché a los de Minessotta pensé: otros hijos de Young, otros Green on Red circa Time ain´t nothing...la voz de Mark se parece tanto a la de Dan Stuart...pero no.

Un día Blue se mostró como su título, en todo su esplendor,como cielo puro despejado tras meses de tormentas y todo cambió.Todavía hoy siento que es una de las cosas más hermosas jamás grabadas y que reaviva el fuego del Laurel Canyon (Joni, los CSN&Y, etc.) pero bajo un paisaje del Medio Oeste, es decir, se siente la diferencia y eso es lo que les hace grandes.

Ahora que se ha reeditado esa OBRA MAESTRA llamada Tomorrow The Green Grass, vuelvo al hogar y a esa anthology casera antes que al lujo de los refritos por muy atrayente que parezca.

Pienso, lo medito y concluyo que TTGG es de esos discos sin los que no podría respirar, así de claro, el mero hecho de pensar que se fuera por el agujero negro de mi recuerdo me produce un vacío existencial y bastante angustia vital.

Tiene un equilibrio tan perfecto de medios tiempos, de good time feeling con sabor a recuerdo, a fuego de campamento que, sin quererlo, captaron en sus 13 secuencias lo que sientes las horas del día en que te enamoras por primera vez.

Yo ya no es que tiemble escuchándole de principio a fin sino que me empapelaría la habitación con la foto en que se toman un helado en la contraportada o con la del sofá en la carretera helada del igual de imprescindible Hollywood Town Hall.

Y ese preachin´the gospel in Durango, esa transmisión de la música es lo más grande que tiene nuestra comuna porque crea vínculos personales y eso es lo que hay que tratar de mantener siempre.

Porque Blue será insuperable pero sólo hasta que le sigue I´d Run Away y los lobos henchidos de amor mezclan sus cuerdas vocales de nuevo en esa mezcla mágica para la que nacieron y los breves y certeros solos de Gary recuerdan a la escuela de George, menos es más.

Los arpegios byrmaniax adornan como guirnaldas de pueblo en fiestas un Miss Williams´Guitar donde Mark te hace querer abrazarle (comprobé en persona que es un buenazo entrañable y le abracé)

Cuarta y balada Parsons, es decir, Two Hearts que , permitanme, es infinita...ayayayay I´m lonely...too, para pasar a esa tempestad que es Real Light donde todo fluye y te sientes pleno y feliz, esto sabes que seguirá contigo por tiempo inmemorial mientras aúlla la Gibson SG granate.

Monta tanto tanto monta Gary como Mark pero los otros dos colegas pierden injustamente el mérito que debe dárseles: Karen y Perlman están soberbios y el batera Heffington impresionante.Esto es cosa de cinco, nunca debemos olvidarlo y esos tíos, los cuatro de la cover del árbol torcido, son los que están ahora ultimando una grabación para nuestros dientes largos que ya no tenían esperanza.

Over My Shoulder me dicen que es de Blood on the Tracks y me lo creo.

Van seis y son de las seis mejores de toda una vida gastando la pasta en r&roll.

La cover de los Grand Funk Railroad se la quedan ellos para siempre y Gary y su portentoso alto parece una dulzaina en Bad Time (os cuento, en su primer bolo bilbaino fue el bis y saltábamos como monas de felicidad, la fiesta fue total y a mi hijo, entonces con dos/tres añítos le cogió en brazos el Louris en Power Records porque le recordaba a su nuevo vástago)

See Him on the Street parece la cenicienta pero es de lo más armónica y la que más gana con las escuchas mientras que Nothing left to Borrow  vuelve al estribillo MÍTICO que es de lo que está plagado esta hermosura.

El piano eléctrico de Ann Jane me encanta porque soy de wurlitzer y de pianos eléctricos, me parece que es el instrumento de la melancolía, del sentimiento pudoroso apropiado para suplicarle a la buena de Ann Jane que no debe llorar.

Vuelta a los Byrds en Pray for Me y es que los Jayhaws al grupo históricamente al que más se parecen en importancia y buenas canciones es a los Príncipes del Folk-Rock.

Para Red´s Song utilizan un rollo Blonde on Blonde tan guapo, tan Queen Jane que es infalible para el enamoramiento y es que la voz de Olson es tan vulnerable, te repite tanto constantes de tu propia vida y encima, Louris llega se pone por encima y te remata. Yo es que no me puedo quedarme con uno u otro, adoro a ambos, lo siento , me gustan sus discos en solitario y cualquier cosa donde estén presentes ( de Gary el Vagabonds, soberbio  y de Mark el Salvation Blues, p.o.m y el de ambos, una joyita)

La intro de desierto del Ten Little Kids es un resumen de mi colección de discos setentera country-rock y luego el disparo en la vena Big Star, siempre la Gran Estrella que guía : este tema es digno de cierre, vigoroso y uno de mis favoritos.

Y si me preguntáis qué me parece el conjunto os diré sin cortarme un pelo que es de los 20 discos por los que me enfrentaría a un batallón de ladrones...como con Harvest, Blonde on Blonde, Exile, Essence, A Ghost is Born... con todos esos que superan sus propios contornos redondos.

P.D: La edición Legacy-Deluxe es imprescindible, aunque sólo sea por la increíblemente no incluida canción que da título al disco que la podéis oír en el programa enlatado de esta semana pero me quedo con esa cosa casera que partió a Durango y nunca regresó.

Laughing, running ,jumping , playing,  hace diez años, hasta el infinito y más allá.

Gontzal, Josu, maite zaitustet.Vayámonos con Ten Little Kids...