CHUCK IS IN LOVE

LET THE FREEDON RING ¡ CHUCK PROPHET
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“De vez en cuando la vida…” que decía el Serrat, te regala ese disco que esperas y que tarda en llegar. Ese examen de madurez de un artista en el que aprueba todas las asignaturas con la mejor nota. Un momento dulce, en el que ya puede darle a todos los palos porque pilota (ese Tribu!): eso ha pasado con los míticos dobles lps: desde Blonde on Blonde, pasando por el disco Blanco, siguiendo por el Exile y acabando en el London Calling.
En esas obras maestras te sentías surfeando en el mejor tubo de la más alta ola del rockandroll. Pero además, única.
Partiendo de la tradición generar tu libro de estilo.
Chuck es grande, en todos los sentidos. Y ahora es para el sonido Memphis-Soul-BigStar-Dylaniano (lo que representó antes de aburguesarse Tom Petty y sus Heartbreakers) lo que Willie Nile es para las serenatas de la metrópolis de la costa este o la nueva peña de los M Ward, Connor Oberst, Jenny Lewis para la dorada California.
Mismos modelos, esquemas renovados y personalidad reconocible.
Chuck ha firmado con su nuevo trabajo su obra maestra y eso que “No other Love” era inmenso y atesora ya un cancionero de r&roll que sólo su amiga Lu lo tiene.
Tiene el “testigo” de esos grandes autores de los dobles vinilos mencionados y adora a the great late Jim Dickinson y la serie B sureña de producciones sucias desde Swamp Dogg a los Cramps…
Además sabe que en la dicción nada como Zimmerman y que los fraseos del “Memphis Blues Again” son insuperables vocalmente y el zenit de lo “cool”
Atascadito en los blues de Memphis, así está el Prophet y que se quede de por vida please…
Superclase. Siempre buscando ecos en paredes de estudios recónditos, esta vez en México en plena influenza fever y con terremotos de escala seria, lo que le da una sensación urgente a la grabación, aquí te pillo , aquí te mato. ( ala London Calling)
Y los arreglos están cuidados, al servicio de los 3 minutos pasados perfectos.
A él le encanta la frase de Bob con la que comienza The Ballad of Easy Ryder (cualquiera acaba un clásico con semejante verso inicial Roger): the river flows, flows to the sea y yo añado y “justo como ese rio fluye este “Let the freedom ring”
Comenzamos por lo que hay que hacer: un primer tema que no traicione tu identidad: riff a lo London Calling (otra vez) y blues sucios letales marca de la casa. Impresionante el “Sonny Liston´s Blues” inicial. Un diez. No olvidemos que es un guitarrista soberbio.
Segundo tiro: “What can a mother do”: aparece su chica , la Finch a los coros e imaginemos que Chuck con los Waterboys hace una versión del “I want you” (Blonde on Blonde) un poco más country. ¿ Mola no? Deliciosa: otro 10.
Tercer acto: rock&Billy acelerado, loco, coros sixties (oh yeah!!!!) Lennon en “El blanco” con los Stray Cats…Perfecta: inevitable, un diez.
Cuarto, la del título…stoniana (siempre Stones, Rolling forever) : es tan fácil ponerla un diez. Preciosos coros, sencilla construcción de orfebre. Su “Real love” (Lucinda)
Quinto: al terreno del blue eyed soul rockero: increíble Holding on. Digna de Otis Redding si intentamos hacer el esfuerzo de imaginar una cover desde el cielo. Respetar los santos cánones siempre da como resultado sacar otro diez.
Sexta declaración: “American Man”, gloria del medio tiempo, pegadiza, bien engrasada, palmas y coros perfectos. Diez!
Séptima: la primera balada rinde homenaje al recitado Lou Reed pero va más allá, es puro Prophet, ese de No Other Love, ese que te parte el corazón en dos. Y así de indefenso, no tengo otra que calificarla con un diez, porque el once no lo debo utilizar y no por ganas. Clásico.
“Cuando casi no existes..no vas a ser echado de menos cuando te vayas…” y una armónica emocionante. Repito: clásico.
Y esto para la octava… si no patina puede ser el disco r&roll de 2009 como The Street of NY (Willie Nile) lo fue en su año (2006)
“Hot Talk” es puro “Black & Blue”: guarrindonga, sexy, cojonuda. Con un groove a lo Miss You que hace que esté en un octavo puesto colocada fenomenal y que su nota sea de diez, por esa sorpresa y ese cambio necesario después de la intensidad de la séptima. ¡Qué manera de tocar…qué sonido el de las paredes mejicanas!
Y estamos en lo que se dice “on a roll” : difícil cuestión en lo que respecta a discos fechados en este año…Presentarme el disco que puede competir con este…por favor…ya que no lo veo.
Y la “novena” es cómo la de las iglesias, otra slow song con steel celestial titulada “Love won´t keep us apart” Estrofa y llegada excelsa al estribillo…Coño, otro diez!
La décima “Good Time Crowd” : otra vez a la alegría callejera , a las palmas y a la redención de los pecados con los tres acordes de rigor y mucho disco de las Ronnetes. Una preciosidad pop a lo “grupos de chicas” que merece un diez. Con subida de octava al final y todo.
Y la once, final que tiene que dar carpetazo a un disco repleto de sobresalientes y que le haga de matrícula de honor por regularidad ejemplar.
Con “Leave the window open” el muy bribón, ha dejado lo mejor para el final. Una declaración de cómo debe ser el amor, una entrada de aire fresco continuo, evitar el olor a cerrado…con otra balada y son tres…siendo todo un lujo.
Esta subida al Everest, la hicieron en su tiempo los mencionados y otros rubios, Tom Petty en “Damn the Torpedoes” o Elliott Murphy en “Just a Story from America”, por ejemplo. De ese liga os hablo.
Y yo emocionado que estoy, como siempre, atrapado como él a los Blues de Memphis.
De corazón…y como decía the great late Lola Flores: “Si me quieren…”irsen” a comprarlo , a bajarlo, a robarlo”